River es, por historia y paladar, uno de los clubes más exigentes del continente y también del mundo. Vestir el Manto Sagrado no es para cualquiera. Y para el hincha millonario no alcanza el “ganar como sea”. Lo saben más que nadie los jugadores que nacen en el semillero del club. Están obligados a entenderlo aquellos que vienen desde afuera.
Adam Bareiro es un fiel exponente de este segundo grupo de jugadores. Luego de varias idas y vueltas, el delantero paraguayo finalmente se convirtió en nuevo refuerzo del Más Grande. Este jueves por la mañana pasó por la clínica para realizarse los estudios médicos de rigor. Y a la salida, comenzó a vivir lo que es el Mundo River.
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Apenas abrió la puerta de la clínica y gambeteó la guardia periodística, Adam Bareiro frenó para saludar a un grupo de hinchas de River que se acercó hasta la puerta. El ex delantero de San Lorenzo se sacó fotos con cada uno de ellos, pero también recibió el primer pedido de la gente: “Hay que ganar la Libertadores Adam. Esto es el Más Grande”, expresaron los fanáticos. Una bienvenida a pura exigencia. Como manda la historia del Millo.
