Hay jugadores que parecen estar tocados por una varita mágica, y Javier Saviola indudablemente fue uno de ellos. Y no solo por su talento extraordinario, sino además por su oportunismo para saber aprovechar las oportunidades.

Es que un día como hoy pero del año 1998, el Conejo hacía su debut en la Primera de River y le alcanzaron solamente algunos minutos para empezar a demostrar toda su clase y su poder de gol. Con tan solo 16 años el delantero recibió un pase de Juan Pablo Ángel en el área rival, la acomodó con zurda y remató cruzado de derecha para establecer el empate en el partido, mientras Ramón Díaz (el DT que lo hizo debutar) sonreía en el banco de suplentes lleno de orgullo.

"Tenía un poco de cagazo cuando estaba por entrar, je. Y la verdad que cuando en la semana previa vi mi nombre en la lista de concentrados no lo podía creer, pensé que se habían equivocado", reconoció Saviola sobre lo vivido en aquellos días.