El superclásico es distinto a todo, es un partido sumamente especial y no importa la competición o el deporte en el que sea: siempre que River y Boca se enfrentan nadie queda indiferente. Es uno de los mejores espectáculos deportivos del mundo y no necesariamente por el nivel futbolístico en sí, sino que lo que llama la atención es el nivel de pasión y rivalidad que existe entre ambos clubes. Se transforma en un problema en cuanto algunos pocos no entienden que la rivalidad es solamente deportiva y se llegan a niveles de violencia que claramente no representan a la inmensa mayoría de los hinchas ni de River ni de Boca.
El hincha, el jugador y el cuerpo técnico saben bien que la semana previa a un superclásico es especial, se siente distinto y la ansiedad es diferente. Y ese sentimiento o se pudo vivir a lo largo de 2020, un año en el cual –producto de la pandemia- se modificó el calendario de tal manera que no hubo ni un solo cruce entre los dos clubes más populares del país. Hay que aclarar que desde marzo hasta noviembre –por torneo local- no hubo actividad y por eso no se dio el tan ansiado superclásico.
Pero el 2021 comenzó con todo: el 2 de enero y por la Zona Campeonato de la Copa Diego Maradona se vieron las caras River y Boca en la Bombonera. El resultado del partido fue 2 a 2 y los autores de los tantos del Más Grande fueron Federico Girotti y Rafael Santos Borré –en ambos casos de cabeza-, la segunda vez que se vieron frente a frente fue el 14 de marzo y nuevamente fue en territorio del eterno rival. Por la quinta fecha de la Copa de la Liga volvieron a empatar, en esta oportunidad fue 1 a 1 y el gol de River lo hizo Agustín Palavecino. Este domingo 16 de mayo se volverán a cruzar y será por los cuartos de final del mismo torneo, será otra vez en la cancha de Boca –ya que el Xeneize quedó segundo en la Zona B- y esta vez habrá un ganador, puede ser en los 90 minutos y sino en los penales.
¿Cuántos clásicos más puede haber en el año?
Hay uno que es seguro y es el de la Copa Argentina, todavía no se determinó fecha ni sede, pero River y Boca decidirán quién pasa a cuartos de final del torneo más federal del país en un mano a mano. También puede haber dos partidos por Copa Libertadores, si bien todavía ninguno de los dos clasificó a octavos, ambos están encaminados en sus respectivos grupos y luego –en caso de pasar- el sorteo determinará si se cruzan en octavos o si ambos avancen, se puede dar en cualquier otra instancia. Por último podría haber un hipotético séptimo superclásico y sería en el próximo torneo local que comenzará luego de la Copa América que se jugará entre junio y julio.
