El 24 de marzo de 1976 se puso en marcha la última dictadura cívico-militar que hubo en el país, la más sangrienta de todas que dejó 30 mil desaparecidos y miles de familias destruidas. Desde hace unos años todos los 24 de marzo se conmemora el día de la memoria, verdad y justicia como reconocimiento a todos aquellos que fueron víctimas del gobierno de facto que estuvo al mando del país desde 1976 hasta 1983. Instituciones como River y Boca tienen la obligación de comprometerse con cuestiones sociales y a pocos días del aniversario número 45 del día que comenzó la barbarie los dos clubes más populares del país realizaron una convocatoria.

La misma es junto con la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y se trata de un llamado a aquellos familiares o amigos de socios y socias de estos clubes que hayan sido víctimas de la última dictadura para que den a conocer sus historias de vida y también para que ambos clubes puedan reivindicar su condición societaria. Es importante la unidad en este tipo de acontecimientos y que los dos clubes más populares del país, que más llegada tienen, se comprometan con estas cuestiones.

Los antecedentes de River con la causa

Una de las acciones más importantes que tuvo el club en relación a la última dictadura militar fue la expulsión como socios de Jorge Videla, Emilio Massera y Orlando Agosti en 1997. Años más tarde y a 40 años de aquel 24 de marzo de 1976, Rodolfo D’Onofrio le regaló a Estela de Carlotto –presidente de Abuelas de Plaza de Mayo- una camiseta con la firma del plantel de aquel entonces. Un año más tarde la Subcomisión del Hincha restituyó una camiseta que había sido sustraída con la leyenda Ni olvido ni perdón. Unos años antes, en 2014 Ignacio Montoya Carlotto –nieto recuperado de Estela y fanático de River- tuvo la oportunidad de salir al Monumental junto a su abuela.