Se viene en simultáneo para River la recta final de la Copa de la Liga Profesional y la recta inicial de la Copa Libertadores, y todo será sin tiempo de respiro. El equipo de Marcelo Gallardo comenzará en los próximos días una seguidilla de mínimo 10 partidos y máximo 14 en 45 días que no tendrá descanso hasta ni más ni menos que el final de la competencia del semestre, donde resolverá su posición final en el torneo local y su futuro en el torneo más importante del continente.

 

GRUPO A
POS EQUIPO PJ PTS
1
COLÓN
9 20
2
RIVER PLATE
9 15
3
ESTUDIANTES
9 15
4
RACING CLUB
9 15
5
SAN LORENZO
9 14
6
CÓRDOBA SDE
9 13
7
BANFIELD
9 13
8
ROSARIO
9 12
9
ARGENTINOS
9 11
10
GODOY CRUZ
9 11
11
ALDOSIVI
9 8
12
PLATENSE
9 8
13
ARSENAL
9 5

Todo iniciará este viernes en Santiago del Estero, cuando visite a Central Córdoba en el nuevo estadio donde viene de ganarle a Racing la final de la Supercopa Argentina. Y tan solo seis días después hará su debut en la Libertadores en el Maracaná de Río de Janeiro frente a Fluminense. Mientras que el fin de semana posterior jugará otro partido decisivo ante San Lorenzo en el Monumental, uno de los rivales directos para la clasificación en el certamen local.

El miércoles 28 de abril cerrará la competencia del cuarto mes del año frente a Junior o Bolivar, quienes se enfrentarán este jueves por el partido de vuelta del repechaje para definir al último clasificado del grupo copero. Mientras que unos días después visitará a Banfield y luego viajará a Colombia para medirse el 5 de mayo frente a Independiente Santa Fe de Colombia. 

El fin de semana del 9 de mayo se disputará la última fecha de la fase de grupos de la Copa de la Liga Profesional, donde el Millonario enfrentará a Aldosivi como local y allí se definirá si finalmente se metió entre los cuatro primeros para disputar los cuartos de final. Y ese partido se jugará unas pocas horas antes del viaje que habrá que hacer a Bolivia o a Colombia por la Libertadores, dependiendo del rival que toque. En definitiva, a River se le viene un calendario tan desgastante como decisivo, donde habrá mucha rotación en el equipo y donde cada partido será una especie de final encubierta.