El volante ofensivo, quien jugó en River durante apenas una temporada, se encuentra afrontando su segunda etapa en Olympique de Marsella. ¿Su deseo a futuro? Regresar al Más Grande.

"Me encantaría volver a River", expresó Lucas Ocampos, en febrero pasado. Claro, su paso por Núñez fue efímero. Si bien realizó parte de las Divisiones Inferiores en La Banda -llegó procedente de la cantera de Quilmes-, lo cierto es que en la Primera del Millonario apenas estuvo un año.

El mediocampista vivió la etapa más dura de la historia de la institución. Matías Almeyda lo hizo debutar frente a Chacarita Juniors el 16 de agosto de 2011, cuando River se impuso por 1-0 con gol de Juan Manuel Díaz. Durante esa temporada, el pibe -en ese entonces tenía tan sólo 17 años- convirtió 7 goles en 39 partidos oficiales, incluyendo la Copa Argentina, y su rol fue fundamental.

Tras el gran desempeño que tuvo en la B Nacional, Ocampos se quedó en River. Pero apenas pudo jugar un solo encuentro oficial en Primera División: fue el 5 de agosto de 2012, cuando el Millonario le ganó 2-1 a Belgrano en el estadio Monumental.

En un abrir y cerrar de ojos, Lucas fue vendido al Mónaco semanas después del triunfo frente al Pirata. Allí disputó 95 encuentros oficiales y anotó 13 goles. En 2015 fue adquirido por Olympique de Marsella, donde participó de 39 duelos oficiales y gritó en 6 oportunidades.

Luego de una temporada en la Ligue 1, los franceses decidieron prestarlo: en primer lugar, se fue a Genoa, donde hizo tres tantos en 17 partidos oficiales. En dicho club estuvo apenas un semestre, entre junio y diciembre de 2016. Más tarde, en enero de 2017, se marchó al Milan. En el Rossonero tuvo poca acción: presenció 12 encuentros por los puntos y no marcó.

Finalmente, en mayo de 2017, regresó a Olympique de Marsella, dueño de su pase. Y en la temporada 2017-18 protagonizó un gran papel: anotó 16 goles en 53 partidos oficiales. Con su equipo llegó a la final de la Europa League, pero sólo le faltó coronarse: cayó 3-0 con Atlético de Madrid, el 16 de mayo pasado.

¿El Mundo River volverá a ver a Ocampos con el manto sagrado? Todavía tiene un largo camino por recorrer. Eso sí, su deseo -claro está- es poder regresar para triunfar, pero todavía falta... es un pibe de 24 años.



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