El pasado 30 de noviembre hubo siete juveniles de River que, por decisión del club, no firmaron su primer contrato y quedaron con el pase en su poder. El caso más resonante fue el de Joaquín Panichelli, muy pedido por los hinchas y de gran año en la Reserva. El delantero, al no tener garantizada su presencia en el plantel profesional, optó por irse libre para firmar en el FC Andorra del ascenso español.

Los otros futbolistas que quedaron desligados del Millo fueron el arquero Agustín Gómez, los defensores Iván Peralta, Francisco Petrasso y Mauricio Camargo, los mediocampistas Valentín Gargiulo y Luciano Paz y el delantero Pablo Cáceres, quien regresó a Deportivo Morón, dueño de su pase. Hasta ahora, solo uno de ellos consiguió club: Petrasso, que firmará contrato por un año en Independiente Rivadavia de Mendoza, equipo de la Primera Nacional.

Pero no irá solo, porque desde la institución mendocina confirmaron que también tienen un acuerdo de palabra para sumar a Luciano Paz. El volante ofensivo categoría 2001 nacido en Jujuy tuvo bastante rodaje en Cuarta División pero nunca pudo hacerse un lugar en Reserva y por eso quedó relegado. Solo jugó dos partidos en la categoría y ahora probará suerte en el ascenso argentino.