Desde que River eliminó a Cruzeiro es inevitable mirar más allá de los cuartos de final de la Copa Libertadores que se vienen. Si bien el calendario marca que Cerro Porteño es el próximo rival, todo el ambiente futbolístico, no sólo el millonario, imagina un nuevo superclásico en la Copa que se daría en la semifinal. Por eso, la consulta es obligada para todos y Javier Pinola no gambeteó cuando le preguntaron si sería una revancha. "No va a ser una revancha. Va a ser un partido nuevo, una fase nueva. No se puede comparar. Con total respeto, uno es una semifinal y lo otro fue una final. Son dos cosas diferentes", fue la respuesta contundente del defensor en Fox Sports.

Por supuesto, Pinola no escapó de la frase lógica sobre que "primero tenemos que pasar a Cerro Porteño y después que toque quien toque", pero igualmente no escapó a referirse al posible cruce con Boca. "Si se da, que cada uno le dé la importancia que crea. En mi opinión, no es lo mismo. Pero es importante porque sería un clásico otra vez", insistió convencido de que no habrá nada igual a la final del 9 de diciembre pasado en Madrid.

 

En plena recuperación de la distensión en el bíceps femoral derecho que sufrió en el partido de ida contra Cruzeiro, el marcador central contó que está aprovechando estas dos semanas sin fútbol para poder reaparecer en la visita a Racing, el sábado 17 de agosto. "Venimos muy bien con la recuperación. Que no haya competencia este fin de semana me sirve y apuntamos a arrancar la próxima con todo". Si todo marcha como planea el cuerpo médico, Pinola estará a disposición de Gallardo para ir a Avellaneda, partido que ya tiene en mente: "Hay que tratar de no desviar el foco. Hay que cargar pilas porque se vienen partidos muy importantes. Va a ser un lindo semestre y el objetivo más cercano es Racing. Estamos en River y no podemos dejar de lado ninguna competencia, tenemos que pelear todo lo que tengamos enfrente.