Ariel Ortega es sinónimo River. El Burrito concentra su carrera en enseñanza y ejemplo permanente para todos aquellos que se están iniciando en el fútbol. Y en una nueva entrevista del ídolo con Lito Costa Febre, volvió a plasmar toda su experiencia. El ex futbolista habló de todos los temas y dejó algunas frases interesantes.

 

"El amor por River es como el amor por mi mamá, yo digo que no se puede explicar. Es como el amor de una madre", comenzó diciendo el Burrito, tan querido por la gente del Millonario. Él sabe que es uno de los máximos ídolos del club, pero no reparó en elogios cuando fue consultado por lo que significa Marcelo Gallardo: “El Muñeco es el corazón de River. Con Marcelo nos queremos, ja. ¿Cómo no nos vamos a querer? Aparte mi hijo es enfermo de River y él le ha dado la alegría más grande de su vida. Siempre quiero que le vaya bien. Lo que ha logrado es impresionante, con un presidente tan fuerte del otro lado. Creo que él ha soñado cosas, pero no creo que tantas y en tan poco tiempo. A mí me sorprende por cómo ha potenciado a tantos chicos también".

Luego, recordó sus primeros momentos en su sueño de futbolista y cuál fue el rol de la pensión del club en su formación, lugar en el que hoy trabaja para ayudar a los chicos. "El desarraigo me costó muchísimo, estuve a punto de dejar cuando estaba en la pensión. Por eso trato de acompañar a los chicos. A veces se ponen a llorar y te parten el alma, son nenes de 10 años. Uno trata de acompañarlos y que sigan adelante: son el futuro de River", explicó conmovido el Burrito.

Volviendo a sus mejores épocas como futbolista, Lito le hizo elegir un compañero que le sorprendía por su rendimiento y Ortega no dudó. "Sin dudas el mejor compañero que tuve en River fue Francescoli. Son esos jugadores diferentes. Ramón Díaz también hacía otras cosas. Es difícil de explicar", reveló el ídolo. Y agregó: "Ramón era un distinto, no pude jugar tanto tiempo con él. Salas también era un crack".

 

Para cerrar, hablando sobre el presente de River, el Burrito recordó cómo vivió la final de la Copa Libertadores 2018. "Lo vi sólo en casa. Me angustia mucho cuando en la cancha putean a los jugadores. Decidí verlo en casa tranquilo. Pero con el gol de Benedetto, escuché los gritos en el edificio y cerré la persiana por las dudas. Después, con los tres goles de River, salí al balcón a gritarlos y revolear puteadas para todos lados. ¡Pensé que iba a salir en los noticieros! Pero por suerte nadie me filmó en ese momento, ja", admitió Ortega. Y sobre su comparación con Juanfer Quintero explicó: "Somos dos jugadores distintos. Tal vez nos compararon en su momento pero no me parece correcto. Igual él hizo el gol más importante de la historia de River y nos dio una alegría enorme a todos los hinchas".