Lucas Boyé parece haber encontrado en España su lugar en el mundo. Luego de haber estado a préstamo en distintos clubes europeos -Reading, Celta de Vigo, Aek Athenas-, el ex delantero de River consiguió la regularidad que tanto necesitaba en el Elche, club liderado por el representante argentino y empresario Christian Bragarnik, y esta tarde, en la última fecha de la Liga Española, salvó a su equipo de descender a la segunda división de españa y condenó al Huesca a bajar de categoría.

El Elche venció 2 a 0 a Athletic Bilbao y Boyé fue el encargado de marcar el primer gol que desató la locura de los 5.000 hinchas presentes en el Estadio Martínez Valero por primera vez desde que comenzó la pandemia. El conjunto español necesitaba vencer al Bilbao y a su vez esperar que Huesca, que enfrentaba al Valencia, perdiera o empatara. A los 28', el argentino marcó la diagonal en el área chica, recibió el centro por bajo de un compañero y solo tuvo que empujarla. En el segundo tiempo Raul Guti aumentó la ventaja y como Huesca empató 0 a 0, el Elche logró la anhelada permanencia.

El ex jugador del Millonario había llegado a préstamo a principios de la temporada y sus buenos rendimientos convencieron a los directivos del Elche de ejecutar la opción de compra de 2.000.000 de euros que Torino de Italia, dueño de su pase, estipuló en el contrato. Así, Boyé se quedará en España y a sus 25 años buscará seguir inflando las redes en el club en el que mejor le ha ido hasta ahora -7 goles en 35 partidos-.