A pesar de tener una corta carrera como arquero, el Tano Fígaro se ganó un lugar protagónico en el fútbol. La peluquería, su otra pasión, lo llevó a meterse en el ambiente y a ser elegido por jugadores de todos los equipos. En la lista de sus clientes predilectos está nada menos que el plantel de River, que lo tiene fichado desde 2016. Dario Del Casale, como se llama este estilista de 50 años, pasó por el podcast de La Página Millonaria para recordar anécdotas junto al Más Grande en estos cinco años. ¡Escuchala!

El Tano tuvo un pasado bajo los tres palos, pero dejó la actividad a los 23 años para dedicarse a la peluquería junto a su papá Hugo. Se preparó toda su vida en el rubro y en los últimos años su camino giró cuando encontró en los futbolistas su nicho de mercado. A partir de una visita del jugador de Tigre, Erick Godoy, comenzó a cortar el pelo en los vestuarios hasta que un día le mandó un mensaje directo a Sebastián Driussi y entró en River

"Le voy a cortar a Driussi, empezamos a pegar una onda, se quedó muy contento. Esto era un miércoles y el jueves me llama y me dice 'mirá, el sábado jugamos la final contra Boca un torneo de verano, Mercado quiere cortarse, ¿podrás venir a River?'", recordó el peluquero que reconoció sus nervios cuando trabajó por primera vez en el vestuario del Monumental: "Vos imagínate los nervios que tenía. Lo bueno es que el Piri y Mercado me abalaban. Primer corte con ellos dos, me puse canchero y ya está. Ese día ganaron a Boca, me acuerdo que recibí un mensaje de Driussi diciendo 'la banda está contenta que ganamos'"

A partir de la invitación del ex delantero Millonario, el Tano se transformó en el peluquero de cabecera del plantel y entre sus clientes también se incluyó Marcelo Gallardo. "A Gallardo hace cuatro, cinco años mínimo que le corto. Tiene momentos que capaz que se deja un poquito más largo arriba o más cortito. Normalmente lo maneja, nunca le hago un corte demasiado jugado. A veces un poquito más corto, a veces más largo, pero no es una persona que tiene preocupación por el pelo. Si bien siempre quiere estar bien prolijito, bien coqueto, cuida mucho su imagen", afirmó sobre el ídolo de River. 

Como la mayor parte de los futbolistas, los jugadores del Más Grande suelen cortarse el pelo una o dos veces por semana. Aunque no hay muchas variaciones en los looks, cualquier cambio puede traerle problemas con los hinchas más cabuleros. "Hace poquito fuimos tendencia en Twitter por el caso de Armani y el caso de Borré. Tenía la colita y justo se la sacamos e hizo los tres goles y la gente no me dejaba de decir: 'Ahora Armani, ahora Armani'. Hasta que le corté, no iban a parar. Se lo sacó por suerte y la gente como que quiere el corte mismo que le hice para el 2018", expresó. 

La relación del Tano con el plantel es de tanta intimidad que fue invitado a las pretemporadas de Los Ángeles, Miami y Orlando, además de las finales de América en Madrid y Lima. De hecho, la promesa de pintarse el pelo tras la victoria en el Bernabéu nació de su peluquería. "Mi hijo Diego se había hecho el color gris y fue a cortar conmigo previo al partido de ida de Racing. Martínez Quarta lo ve y le dice: 'Yo me voy a animar, si salimos campeones, me hago tu color'. Él tenía una amistad muy íntima con Montiel, era todo juntos. Yo le estaba cortando a Martínez Quarta y mi hijo a Montiel y le dice a Cachete: 'Vos también te lo vas a hacer'. 'Yo más bien', le dice Montiel. Después era ese primer día ya se sumó uno, dos, tres. Imaginate yo. Enzo Pérez, 'yo también' a la otra semana. Pinola, 'yo la barba'. Zuculini, Borré. Cada partido que iba pasando ya nadie hablaba del tema, pero era 'acuérdense, eh'. La mayoría se lo hicieron todos, fueron diez que se lo hicieron", recordó. 

Más anécdotas del Tano Fígaro siendo el peluquero del plantel de River

 

-"Terminó el partido en Madrid, me llama Ponzio: 'Tano, te esperamos en el piso tal para cenar'. Yo fui a la famosa cena íntima que estuve ahí. No tengo una foto, pero estuve ahí. Encima fue gracioso porque yo llegué un poquito más tarde después de la comida y me cantaban 'ole, ole Tano, Tano'. ¿Sabés lo que es eso? Que te festejen cuando vos entrás. Es muy loco".

-"El corte que más me piden los clientes en un momento fue el de Casco, ese polémico. Porque el de Casco vino justo con la serie Peaky Blinders que era un corte muy rabioso, entonces no sé si Casco había visto esa serie y le gustó. Ese me pidieron mucho, mucho, mucho. Después el de Quintero cuando se hizo bien rapadito para adelante, el de Driussi ni hablar. El de Borré también, la cresta de Borré".

-"Un día te encontrás que gana River y cuando volvés hay una alegría diferente. Ganó River y 'che, hacemos una foto', están contentos. Termino siendo como fanático. Aparte vos estás con un chico que te está contando sus preocupaciones, sus problemas, sus miedos, sus ansiedades. Entonces ya sabés lo que pasó el día anterior con un problema familiar. Hace el gol y te ponés feliz".