Las dos Libertadores que River ganó en la era Gallardo, justamente, no tuvieron al entrenador dentro del campo de juego. De hecho, la final de este sábado será la primera para Napoleón. Al menos en cuanto a partidos definitorios se refiere.

Es que en 2015, cuando La Banda obtuvo el primero de los dos títulos que alcanzó junto al Muñeco, el DT se fue expulsado a los 27 minutos del segundo tiempo en el estadio Azteca de México. Allí, River igualó 0-0 ante Tigres, para luego disputar la revancha en casa y quedarse con la Copa. Fue Matías Biscay quien se calzó el buzo, y Gallardo lo miró desde un palco.

Ya en 2018, una salida tardía del equipo en la ida de la semifinal ante Gremio derivaría en la suspensión de Gallardo. Y en la vuelta, tras bajar al vestuario a hablar con sus jugadores, fue sancionado de manera categórica: ni siquiera pudo ir a la ida de la final con Boca, en La Bombonera, y la revancha del Bernabéu la vio, también, en las tribunas.

Ante Flamengo, y en búsqueda del bicampeonato de América, será la primera vez de Gallardo en un partido que sentenciará quién de los dos equipos participantes se quedará con esta edición del torneo.