El nuevo entrenador del Zaragoza contó que habló con el jugador y le manifestó que le gustaría que se quede, pero únicamente si está enfocado en el club. De esta manera, le abrió las puertas para que regrese a Núñez.
Primero fue Javier Aguirre, quien entendió la situación de Leonardo Ponzio, y ahora Manolo Jiménez, quien reemplazó al mexicano en el banco del Zaragoza, pensó de la misma manera.
“Veo difícil que siga en Zaragoza. Es un grandísimo profesional y le insinué que, por mi parte, si no tiene la cabeza al cien por cien en el Zaragoza, no lo necesitamos así. Si él desea salir, de mi parte no hay ningún tipo de problema”, manifestó el flamante entrenador del conjunto aragonés.
Sin embargo, dejó todo en mano de la directiva, que ya había afirmado que no le dará facilidades para irse seis meses antes de que termine el contrato: “Primero está el club y él tiene vínculo hasta junio; tiene que resolver el tema con la dirigencia”.
Para dejar en claro su postura, Jiménez explicó: “No lo tendré en cuenta si no está metido con el proyecto. Si no está a gusto en el club, no estará en condiciones”. Ahora, resta saber cómo se desenvolverán las conversaciones de Ponzio con los directivos del Zaragoza.



