Un día como hoy, pero de 1939, uno de los máximos ídolos de la historia del Millonario comenzaba a dar sus primeros pasos en la Primera de River: Ángel Labruna, quien marcó a fuego su paso por la institución.
A fines de la década del ’30, un jugador nacido en el barrio porteño de Palermo, Ángel Labruna se ponía el manto sagrado para jugar su primer partido oficial con La Banda y empezar a hacer historia en la institución.
El debut de Angelito fue contra Estudiantes de La Plata, por la fecha 14 del campeonato local, en un encuentro que se llevó a cabo en la ciudad de la diagonales y que terminó en caída 0-1. El delantero, quien en aquel entonces tenía 20 años, ingresó por el Charro Moreno, otro de los que formaron parte del equipo de La Máquina.
Una vez que Labruna se puso la camiseta de River, muchos hinchas empezaron a entusiasmarse con la calidad que tenía para jugar. Sin embargo, el primer tanto que anotó llevó cuatro meses de espera, en un 4-2 del Millonario ante Atlanta.
Con gambetas, goles y hasta con una ingeniosa picardía al declarar, el Feo se ganó los corazones de todos los fanáticos de La Banda. Cabe destacar que defendió los colores rojo y blanco durante 20 años. Además, gritó en 293 oportunidades -actuó 515 veces oficiales-, convirtiéndose en el máximo artillero del club y de Argentina, junto al paraguayo Arsenio Erico.
Angelito no sólo fue ídolo por haber conseguido grandes títulos como jugador y técnico de La Banda. Fue aún más que eso. Fue el comienzo, el ADN que hizo que River empiece a ser El Más Grande, lejos.
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