Homenajes como este emocionan. Hasta las lágrimas. Porque Amadeo Carrizo es parte de la historia de River, respira estos colores y siente el club como pocos. Por eso, este sábado el ídolo de 93 años (nació el 12 de junio de 1926) fue agazajado en el barrio porteño de Villa Devoto.

Allí, se inauguró un mural con su rostro y sus armas futbolísticas más importantes y con las que logró hacer historia debajo de los tres palos: las manos. Visiblemente conmocionado, el gran guardameta les agradeció a todos por el momento que le hicieron pasar y dedicó sentidas palabras para todos.

 

"Les agradezco profundamente. Son casi todos de Devoto y nos vemos de pasada. Es un recuerdo imborrable para mí", mencionó Amadeo, quien es un vecino más de la zona. ¡Qué homenaje te hizo el barrio, ídolo! Totalmente merecido.