Era su primer cara a cara como entrenadores y en la previa se generó una importante expectativa en los hinchas de River al tratarse de dos personalidades importantes para el club y sobre todo porque fueron protagonistas en la conquista continental de 1996. Ramón Díaz, al mando del Al Hilal de Arabia Saudita, y Hernán Crespo, al frente del Al Duhail de Qatar, se cruzaron por las semifinales de la Champions League de Asia y prácticamente hubo un solo equipo en la cancha.

Los dirigidos por Ramón Díaz no tuvieron piedad ante la flojísima presentación de los hombres de Crespo y al cabo de los primeros 45 minutos ya estaban goleando ¡por 5 a 0! Odión Ighalo marcó los primeros dos, luego aumentó la cuenta por duplicado el francés y figura Moussa Marega y Salem Al-Dawsari, autor de uno de los golazos de Arabia Saudita en el mundial ante Argentina, puso el quinto. En el complemento, Ighalo sumó dos gritos más a su cuenta personal y redondeó el inesperado 7 a 0.

Minutos antes del pitazo inicial, hubo un fraternal abrazo entre Ramón y Crespo al costado de uno de los bancos de suplentes. Sonrieron seguido de una charla de varios segundos, antes de que el ex técnico de Banfield saludara a Emiliano Díaz, hermano y parte del cuerpo técnico del Pelado. La buena onda y la gratitud quedó de lado en el verde césped y al momento de la verdad, el Al Hilal arrolló al Al Duhail.

De esta manera y luego de haber hecho un papel más que digno en el Mundial de Clubes (perdió la final con el Real Madrid), el equipo de Ramón Díaz se metió en el partido decisivo de la Champions asiática. Su rival será el Urawa Red Diamonds de Japón, equipo que ya está clasificado desde el mes de agosto luego de imponerse por penales ante el Jeonbuk Hyundai de Corea del Sur.