Enzo Nicolás Pérez vive a sus 35 años un presente extraordinario y de absoluto esplendor como futbolista. El mendocino no se cansa de vislumbrar, y tampoco se cansa dentro de la cancha, ya que es el único futbolista de campo (junto a Franco Armani) que ha jugado los 540 minutos que lleva disputado River en la Copa de la Liga Profesional, y en una posición que puede resultar muy desgastante a esa edad.

Además muestra unos números plenamente envidiables en lo que respecta a la distribución de la pelota, un aspecto que es esencial para el funcionamiento colectivo de Marcelo Gallardo, donde el Muñeco lo considera un pilar fundamental para su estructura de juego. El 87,8% de sus intentos de pase llegaron a destino de un compañero, con el aliciente de saber que solamente el 12,5% de todos sus toques son para atrás, que en teoría siempre es lo más seguro en el fútbol.

Además ganó el 70% de los duelos aéreos, y triunfó en el 63% de las veces que fue a quitar la pelota al piso. Por otra parte generó 9 infracciones de los rivales, lo que significa que lo enciman mucho a lo largo de los 90 minutos. Y solamente cometió 10 foules en los seis partidos disputados, algo destacable para el roce en el que suelen entrar los mediocampistas centrales, acumulando sólo dos tarjetas amarillas. Números que hablan por sí solos para destacar a un jugador cada día más completo y determinante.