El coronavirus sigue acenchando a buena parte del mundo, y las nuevas cepas parecen ser más agresivas para la salud, sobre todo en los adultos más jovenes. Y el mundo del fútbol no queda excento a la exposición del virus, donde en planteles como en River acechó de manera abrupta en gran parte de la delegación, afectando a más de 20 futbolistas y a algunos integrantes del cuerpo técnico.

Y uno de los que más padeció la enfermedad fue Paulo Díaz, quien luego de los estudios realizados por el club para saber si habían quedado secuelas se descubrió que padece una miocarditis (una inflamación en el tejido que recubre al corazón) que lo alejará de la posibilidad de jugar la Copa América y que lo mantendrá como mínimo un mes fuera de la posibilidad de entrar a las canchas. El chileno deberá hacerse estudios periódicamente para saber su evolución.

"Él está triste por no venir a la selección, de no poder jugar en River Plate porque es super sano. Al principio de la enfermedad sintió malestares y dolores. Y cuando los médicos vieron en los exámenes y prefirieron no exponerlo y cuidarlo", sostuvo Ítalo Díaz, padre del futbolista, en diálogo con "Las Últimas Noticias". Y agregó sobre lo que le espera en los próximos días con una mirada bastante optimista. "River se ha preocupado mucho por él, están atentos, viendo siempre cómo está. Solamente queda recuperarse. Hay como dos o tres casos en Argentina que les pasó lo mismo, pero pudieron volver a jugar", cerró.