Todavía hay muchas gente a la que no le cayó la ficha, aún pasadas varias horas del final del partido contra Croacia. Contra viento y marea, sufriendo en algunos tramos y disfrutando en otros, Argentina se metió en la final de la Copa del Mundo y espera por Francia o Marruecos, que jugarán este martes por la tarde. La emoción y el desahogo se sintió a flor de piel en todos los rincones del país y en todas las partes de mundo, con multitudes saliendo a la calle a festejar.
Dentro de la cancha, los jugadores también lo vivieron como un hincha más. Messi con una sonrisa de oreja a oreja tratando de entender lo que acababa de lograr, Scaloni tratando de contener las lágrimas al ver a los suyos festejar y al divisar a sus hijos en las tribunas y Julián Álvarez revoleando una botella de agua cual nene en un viaje de egresados. Así se vivió la clasificación al partido decisivo del próximo domingo a las 12 del mediodía.
En medio de la algarabía frente a una de las tribunas del Estadio Lusail, Enzo Fernández, otro que tuvo un partido consagratorio y no dejó de festejar abrazado a Julián,tuvo un gesto que enloqueció y enorgulleció a los hinchas de River. En un momento, en pleno salto al ritmo de alguna de las canciones que le hicieron a la Scaloneta, Enzo se llevó al mano al pecho y se dibujóla banda roja, seguramente al ver una camiseta de River en la tribuna o porque le gritaron algo referido al Millo. El Más Grande está presente en todos lados, siempre…