El Monumental lo ovacionó y bien merecido lo tiene. Nicolás De la Cruz jugó otro partido imperial, siendo amo y señor del mediocampo de River, jugando y haciendo jugar a sus compañeros. Una definición top en el primer tanto frente a Barracas (la empezó y la terminó él con un zurdazo al segundo palo) y después un sacrificio intachable para correr, recuperar y siempre salir disparado en velocidad para tratar de llegar al área o para sumarse al circuito de juego y unir líneas.

"El primer tiempo estuvimos enredados, no encontrabamos los espacios a espaldas de los volantes, teniamos pase afuera y no lo veiamos. En el segundo tiempo encontramos más espacios para circular la pelota y jugar. Por suerte nos llevamos los tres puntos", analizó el uruguayo luego del encuentro en TNT Sports, consciente de que River no mostró su mejor versión y que se sufrió más de la cuenta. "No termino de encajar nunca con el tema físico je, pero hoy pude encajar mejor y pude completar 90 minutos y sentirme mejor", agregó sobre su irregularidad física.

Por otro lado, el número 11 le dio una grata noticia a los hinchas de River en torno a su futuro en el club: "Se hablaron muchisimas cosas, si bien siempre estuvimos en permanente contacto con los dos clubes, siempre intente enfocarme en el día a día. A fin de año tengo un objetivo en lo personal que es muy importante, pero siempre enfocado y con las mismas ganas de seguir aprendiendo. De acá no me voy a ir nunca libre, tengo una gran admiración por River".

"Voy a renovar, eso siempre estuvo arriba de la mesa. Están ultimanado detalles y en las próximas semanas seguro se va a estar dando", cerró. Cuando él esta bien, el equipo se potencia. Cuando él está mal, el equipo se cae, por eso su presencia y su función es cada vez más importante. Y por eso había tanta expectativa con respecto a la extensión de su vínculo que vence el 31 de diciembre. Hay Nico para rato y eso es para celebrar...