Falta que comete una persona que no cumple su palabra o que no guarda la fidelidad debida. Esa es la definición de 'traición', aunque ya podría sumarse Daniel Angelici como sinónimo. El presidente de Boca declaró el sábado pasado que Boca no iba a perder los puntos ya que ese era un principio que iba en contra de la moral y ética de su equipo.
Pasó la noche y Boca tomó la postura irrevocable de pedir los puntos en Paraguay. No quieren jugar contra River. No importa dónde, ni cuándo, ni cómo. Contra River, no quieren jugar. No les importa el tamaño diminuto con el que las generaciones futuras verán al club de la Ribera, la necesidad imperiosa de ellos, es coronarse en la Libertadores 2018 por escritorio.
También desligó de responsabilidades a River en cuanto a los incidentes provocados en las afueras del Monumental, aunque también en el insólito reclamo de Boca, trata de culpar al Más Grande para conseguir el título por decreto.
"Nosotros siempre vamos a decir lo mismo, los partidos los ganamos o lo perdemos adentro de la cancha. Quiero agradecer a la Conmebol y a la gente de River, desde que hemos llegado al club se han preocupado por nuestros jugadores y han puesto todo a nuestra disposición, y esto escapa a ellos porque pudo haber pasado a 200 metros de nuestra cancha", afirmó sin titubeos el sábado pasado.
¿Qué te han hecho Boca?
