El no perder la condición física durante el parate a causa del coronavirus es el gran desafío que tienen los futbolistas. River, el precursor de la postura de frenar la pelota, ya tiene algunos de sus jugadores entrenando en lugares públicos: se trata de Julián Álvarez y Santiago Sosa.

Todo el plantel millonario recibió una rutina personalizada diagramada por el preparador físico Pablo Dolce, quien realizará un seguimiento del estado individual de cada futbolista. El entrenamiento incluye trabajos aeróbicos y de fortalecimiento general, además de ejercicios de movilidad que pueden realizarse en las casas, gimnasios particulares.

El tema es cuando algunos de los jugadores no tienen espacio en sus domicilios para realizar las tareas y se ven obligados a salir a espacios públicos para poder hacerlos con mayor comodidas como en este caso ocurrió con dos de los pibes del equipo de Gallardo.