Fue una de las novelas del último mercado de pases. Las versiones comenzaron con su posible fichaje, luego por quedar completamente descartado y algunos hasta se animaron a confirmarlo como nuevo jugador de River. El sueño del jugador de vestir el Manto Sagrado motorizaba la posibilidad, pero esta finalmente se frustró y hoy, por todo eso, pero especialmente por ser hincha, Iker Muniain jugará un partido especial cuando visite al Millonario con San Lorenzo.
En medio de la temporada anterior, el crack vasco de 31 años anunció que no seguiría en Athletic Bilbao al finalizar su contrato. El ídolo se marchaba después de toda una carrera en un mismo club, algo prácticamente inédito en el fútbol de hoy. Y entre sus posibilidades figuraba venir a River a cumplir su gran anhelo profesional.
El amor de Iker Muniain por River
Desde sus inicios en la primera del club rojo y blanco, Muniain no solo no ocultó sino que reiteradas veces confesó y explicó su amor por el Millonario. Así, luego de considerar que su ciclo en Bilbao estaba cumplido, desechó ofertas de Arabia para priorizar a River. Y aunque hubo negociaciones, la realidad es que ni Martín Demichelis ni Marcelo Gallardo lo consideraron prioridad.
Por eso, y ante la sorpresa de todo el fútbol argentino, terminó firmando en San Lorenzo. Esta noche pisará el campo de juego del Monumental, y más allá de no ser con la banda roja cruzada en el pecho, sin dudas sentirá ese calor que veía a miles de kilómetros por televisión. Mientras tanto, su sueño sigue vigente: tendría una particular cláusula en su contrato en Bajo Flores.
Iker Muniain, titular vs. River: sus números en San Lorenzo
El volante vasco no tardó en adaptarse al siempre complicado fútbol argentino. En sus primeros minutos con la casaca azulgrana ya demostró su técnica distinta y su inteligencia para jugar. El correr de los partidos le fue haciendo ganar ese roce, vital para poder destacarse no solo con pincelazos de calidad.
Muniain es el dueño de la mitad de la cancha del Ciclón, y la gran figura del equipo. Lo era con Romagnoli, y lo es con Russo. Dentro del vestuario, también se consolidó como uno de los referentes. Lleva dos goles y una asistencia en 11 partidos. Hoy jugará de arranque.
Un jugador distinto, hecho a la medida del paladar riverplatense, e hincha del Más Grande. Que se disfrazó para escaparse de la concentración en Bilbao para ir a ver la final de Madrid y festejar como uno más de nosotros. Es que Muniain es uno más de nosotros, independientemente de que esta noche tenga puesta otra camiseta.
