Después de un 2025 para el olvido, River comenzó a llenar los casilleros de las buenas decisiones de cara al 2026 con las rápidas contrataciones de Fausto Vera y Anibal Moreno en el lugar más sensible de la cancha donde necesitaba caras nuevas y de calidad en lo inmediato. Y en lo que respecta al armado final del mediocampo en la planificación del plantel también hay futbolistas como el caso de Giuliano Galoppo, a quien se le termina el préstamo con el club el 31 de diciembre y hay que terminar de resolver su continuidad.

ver también
Miguel Borja: provocador y desagradecido con River, y un vendedor de falsas ilusiones con Boca
La información marca que ya está todo acordado de palabra con el mediocampista de 26 años para comprarle un porcentaje del pase al San Pablo, en una negociación donde también pueden formar parte tanto Enzo Díaz como Gonzalo Tapia, futbolistas de River que hoy están en el equipo brasileño. Si bien todavía no hay nada firmado, la cuestión se podría resolver en los próximos días siempre y cuando Galoppo solucione un conflicto económico que le surgió con el TAS debido a un inconveniente con su representante, y que podría quedar inhabilitado para jugar si no lo hace.
Pero más allá de todo aquello: ¿es una correcta decisión de River apostar a Galoppo para el futuro, o no se justifica el gasto teniendo en cuenta lo que hay en el plantel y las recientes contrataciones? En un primer momento su llegada causó mucha expectativa a comienzos del 2025, donde incluso hizo su carta de presentación con un golazo en el Monumental en aquel amistoso disputado contra la Selección de México.
Pero terminó el año a tono con el flojísimo andar del equipo, e incluso se compró un problema innecesario luego de haber quedado eliminado de la Copa Argentina frente a Independiente Rivadavia. El hecho de haber errado un penal de la definición no es lo más grave porque cualquier futbolista puede fallar, pero un feo cruce de miradas con un hincha post partido lo dejó en el ojo de la tormenta con el termómetro de la gente y eso le costó silbidos y reprobaciones desde la tribuna en la recta final de la temporada.
Anclado exclusivamente en lo futbolístico, lo más productivo que ha aportado Galoppo es su llegada permanente a las inmediaciones del gol, inclusive destacándose con buena contundencia. En el contexto de un equipo apático en ataque y con mucha falta de ideas, el hecho que haya convertido siete goles siendo mediocampista es hablar de un plus muy importante y valioso.

Inclusive se destaca que sus goles o generaciones de situaciones en ataque no solo parten de llegadas vacías al área por sorpresa o el oportunismo de saber capturar rebotes dentro del área, sino también desde el juego aéreo en la pelota parada, otro aspecto donde a River siempre le suele costar encontrar soluciones para abrir partidos.
Sin embargo no todo ha sido color de rosas a la hora de destacar su juego. En primer lugar porque no se ha visto un lugar puntual de la cancha donde se sienta plenamente cómodo, sabiendo que por características no es un volante central para jugar como único 5 y tampoco se muestra como un interno demasiado participativo con la pelota como para ser nexo en los circuitos de juego. Sus roles pasan más por ser un auxilio en la recuperación y sus variantes en ataque, donde también suele patear mucho de media distancia.
¿Está bien tomada la decisión por Galoppo?
Analizando todas las variables, entiendo que está bien darle una continuidad en el club. Primeramente porque hoy River sacando a él se quedaría sin mediocampistas encariñados con el gol, un aspecto que es clave a la hora de conformar un buen plantel. Por el compendio de sus virtudes no se ha ganado definitivamente un lugar para ser titular, pero sí para garantizar que puede ser un recambio confiable y que puede estar a la altura cuando el equipo lo necesite.





