En un momento en el que poco a poco comenzaba a recuperar su confianza y el nivel supo destacarlo en River, Rodrigo Aliendro sufrió una nueva lesión que lo alejará por un largo tiempo de las canchas. Un nuevo golpe que sufre el oriundo de Merlo y que lo pondrá a prueba una vez más.
Confiado en que saldrá adelante, el Pepi Aliendro se mostró optimista en las redes sociales y tiene grandes motivos para confiar en esto. Con fuerza y voluntad, el volante supo bajar desde la Primera hasta la D para volver a la élite y festejar un título como figura de River.
El paso de Aliendro por el ascenso y su particular trabajo
Con 33 años, Aliendro pasó por varios estados en su carrera que lo prepararon para este duro momento que le toca atravesar y ya conoce lo que es caer para volverse a levantar. No hay que olvidarse que el Pepi pasó de jugar en Primera con Chacarita a descender a la D con Ituzaingó.
Sí, tras perder la categoría con el Funebrero, Aliendro se fue a préstamo por dos años al León del Oeste y también descendió, pero a la Primera D. Lejos de abandonar el barco, Aliendro completó su cesión con un nivel muy destacado dentro del equipo de Ituzaingó.
Durante el tiempo en el que jugó en el equipo del oeste, Aliendro se las tuvo que rebuscar para llegar a fin de mes y trabajaba como delivery en una pizzería de barrio. Según contó hace unos años, terminaba de entrenar a la tarde y después trabajaba de 19:00 a 00:00 hrs. con la moto.
Vuelta a Chacarita y el salto a Primera
Gracias al gran nivel que demostró en Ituzaingó, Aliendro se ganó un lugar en el plantel de Chacarita que jugaba la Primera B Nacional. Plantel del cual se transformó en figura con 10 goles y 7 asistencias en 56 partidos que llamaron la atención de Atlético Tucumán.
Ya en el decano, Pepi empezó a demostrar todo su fútbol en Primera División y fue parte del histórico plantel que jugó Copa Libertadores. Disputando 116 partidos en total, Aliendro dejó una huella imborrable en Tucumán y así pegó el salto a Colón.
De su paso por el Sabalero hay poco que agregar. Figura total del equipo, Aliendro formó parte del equipo que ganó la Copa de la Liga 2021 y que se metió en la historia del fútbol argentino. Tal fue su labor que Marcelo Gallardo lo buscó como el sucesor de Enzo Fernández.
El arribo a River y sus lesiones
Desde que llegó al Millonario, Aliendro alternó buenos y malos momentos. Los positivos, que fueron muy interesantes, se vieron frenados por lesiones que ahora vuelven a acosarlo justo cuando levantaba su nivel tras un comienzo de año complicado.
Después de su espectacular arranque en agosto del 2022, Aliendro sufrió una fractura macizo facial que lo dejó varios meses fuera de la cancha. Tras esto, volvió a ganar ritmo con Demichelis y fue la gran figura de la LPF 2023 que ganó el Millonario. Sin embargo, en agosto tuvo su primera luxación de hombro.
En este 2024, después de un comienzo muy irregular, finalmente Aliendro estaba mejorando de la mano de Marcelo Gallardo. Presente que, nuevamente, se frenó a causa de una nueva luxación que lo dejaría fuera de las canchas hasta 2025. Un duro golpe que no lo frenará.