La locura por River se siente en todo el país, pero especialmente en Núñez. Cada rincón del barrio se viste de rojo y blanco, sobre todo el estadio Monumental, cuyas entrañas son un resumen perfecto de lo que significa la palabra alegría, tan difícil de describir cuando hay tantas emociones fuertes.

Un ejemplo de ello se vivió en la confitería del estadio Monumental, donde cientos de fanáticos montaron una suerte de popular. Como si se tratara de la tribuna Sívori, las sillas y mesas hicieron las veces de escalones de cemento mientras las pantallas de TV mostraban el arribo del plantel a Ezeiza.

“Sí, sí, señores, yo soy de River, sí, sí, señores de corazón porque este año de acá de Núñez, de acá de Núñez salió el nuevo campeón” fue una de las canciones con mayor adhesión bajo el techo entre bebidas, comida y demasiada satisfacción.

Además, los hinchas entonaron “yo te quiero, River Plate, yo a vos te sigo, vos sos mi vida”, “el que no salta, abandonó” y el hit que generó mucha diversión últimamente: “Al cobarde de Tevez lo mandaste a la tele a pedir por favor que el partido no se juegue…”.