La increíble historia de Franco Mastantuono: la joya de River que casi deja el fútbol por el tenis

Franco Mastantuono cumplió 16 años el lunes de la semana pasada (14/8) y recibió uno de los regalos que más esperaba: lo llamaron desde River para anunciarle que en los próximos días iba a firmar su primer contrato como futbolista profesional. Todavía juega en Séptima División, donde es el capitán, goleador y dueño de la emblemática camiseta número 10. Es una de las máximas promesas del semillero millonario y está llamado a ser un jugador distinto, de esos que enamoran al hincha del Más Grande por su exquisito paladar.

Quienes se levantan muy temprano los sábados para ver las jornadas de fútbol juvenil puedan dar cuenta de sus cualidades: es un jugador con una pegada espectacular, que tiene un gran desequilibrio en el uno contra uno y cuenta con un repertorio que sale de la norma para resolver en pocos segundos. “Tiene una cabeza diferente”, suelen decir los técnicos que ya tuvieron la dicha de dirigir a Mastantuono. Y esa mentalidad puede deberse a otra de sus grandes pasiones: el tenis.

Franco Mastantuono tuvo la chance de llegar a River cuando tenía ocho años, cuando el club decidió realizar una prueba en Azul, localidad bonaerense en la que nació. Tenía muchísimas condiciones, afirman quienes lo vieron jugar en aquel entonces. Sin embargo, recibieron una respuesto poco habitual para un chico de su edad: le dijo que no al Millonario porque su cabeza estaba puesta en el tenis.

La respuesta del pequeño Franco Mastantuono no fue un capricho ni una cuestión descabellada: en ese entonces estaba considerado como una promesa del tenis argentino. De hecho, estaba rankeado como uno de los mejores diez tenistas del país en la categoría infantil. De haber optado por la raqueta, seguramente hoy sería uno de los mejores jugadores de la actualidad. La buena noticia para River es que finalmente eligió la pelota de fútbol.

La llegada de Mastantuono a River

Franco Mastantuono llegó a River un par de años después de aquella primera prueba en Azul, en la que todavía soñaba con ser el mejor tenista de la Argentina. El tiempo pasó, le picó el bichito por el fútbol y el tren pasó por segunda vez. Luego de estar una semana a prueba, se sumó a las infantiles de River a fines de 2019.

Como el período de fichajes estaba cerrado en AFA, terminó jugando para la Liga Metropolitana. De hecho, su primer partido en el Más Grande fue la última fecha del torneo ante Banfield y ese día se coronó campeón. “Fue una alegría inolvidable, jugué con pocos entrenamientos, pero gracias a la ayuda de mis compañeros pude demostrar todo sin presión”, recordó el joven enganche.

La pandemia y un debut postergado

A comienzos de 2020 finalmente Franco Mastantuono fichó para River en la Asociación del Fútbol Argentino. Arrancó la pretemporada con la Pre-Novena, jugó sus primeros amistosos y un torneo en Ayacucho. A la vuelta, a pocos días del inicio del torneo, se produjo un hecho que postergó su debut oficial en AFA: la pandemia y el encierro.

Los chicos de las infantiles de River volvieron a sus hogares y pasaron los primeros meses de aislamiento con sus familias. Durante largos meses se dedicaron a entrenar a través de una videollamada. También siguieron un plan de nutricional a través de un archivo PDF que le enviaron a cada jugador por correo electrónico. Hasta que volvió todo a la normalidad y volvió a sonreir la pelota.

Las características de Franco Mastantuono

Es el dueño de la camiseta 10 y suele jugar de enganche, pero tiene condiciones para adaptarse a las distintas posiciones de la mitad de la cancha. Por su perfil zurdo también puede ubicarse como volante por izquierda. “Me gusta tener la pelota, gambetear, ser vertical en mi juego y patear de media distancia. Juego a uno o dos toques y me gusta el uno contra uno en los últimos metros de la cancha. También estoy llegando más al gol”, se definió el juvenil oriundo de Azul.

A la hora de buscar un espejo futbolístico, Franco Mastantuono no duda en señalar a uno de los grandes referentes del plantel actual: “siempre miraba a Nacho Fernández, me parece un jugador muy completo. También trato de copiar los movimientos de Matías Suárez y a Julián Álvarez”, admitió Mastantuono, que además reconoció quién es su ídolo máximo en este deporte: Lionel Messi.

Un presente arrollador

El 2023 fue una año consagratorio para Franco Mastantuono. Es que más allá de la firma de su primer contrato profesional, el 10 de la Séptima de River viene atravesando un nivel altísimo. Es hasta el momento el goleador absoluto de su categoría con 17 gritos y es el segundo jugador con más tantos en todo el fútbol juvenil de AFA, solamente por detrás de Isaías Gutiérrez, goleador de Banfield en Novena División con 20 tantos.

Este buen presente en las divisiones juveniles de River le permitió entrenar durante gran parte del año con el Sub 17 de Argentina. Es más, Diego Placente tenía en mente llevarlo al campeonato Sudamericano de la categoría, pero una lesión muscular le impidió formar parte de la nómina. Tiene todo el futuro por delante para brillar con la camiseta de River y de la Selección Nacional.