La secuencia quedó en el recuerdo de los hinchas de River. Falta al borde del área, expulsión a Ángel David Comizzo e incertidumbre total. El equipo que dirigía Ramón Díaz se jugaba una parada clave frente a Racing, con apenas tres fechas más por delante. Empataba 0-0, no tenía más cambios y debía mandar un jugador al arco. Martín Demichelis asumió esa responsabilidad, el tiro libre de Claudio Úbeda dio en la barrera, Ricardo Rojas puso la cabeza y Nelson Cuevas empezó a correr hasta marcar el gol del 1-0 definitivo.

Ocurrió el 28 de abril de 2002. Iban 45 minutos del segundo tiempo. Gracias a ese triunfo épico, River se encaminó hacia el título que terminó logrando en el Torneo Clausura. Lo que pocos conocen es el motivo que llevó a Demichelis para ser el reemplazante circunstancial de un monstruo como el Flaco Comizzo, una de las figuras de ese conjunto sólido y ganador. El propio protagonista develó el misterio con humor y lujo de detalles.

Demichelis había debutado un año y medio antes en la Primera de River

Fui al arco porque en alguna parte del ADN de mi papá, quien fue arquero, me salió al arco. En mi pueblo (NdeR: Justiniano Posse, Córdoba) era volante central, pero cuando el arquero de la división siguiente no estaba, me ponían ahí“, confesó el ex marcador central de River y actual DT de la categoría Sub 19 de Bayern Münich.

Demichelis también explicó que el primer candidato fue un enganche: “Qué responsabilidad que fue, qué locura. Alguien tenía que hacerlo. Andrés D’Alessandro se había puesto los guantes, pero era más chiquito, entonces me los puse yo“.

Además, el ex-Manchester City amplió la historia con una anécdota. “Una vez me lo encontré a Pipino Cuevas porque la Selección jugaba contra Paraguay. Yo estaba en el lobby del hotel con Juan Pablo Raponi. Baja Pipino, nos ve y le grita ‘Raponi, sin vos yo hoy no soy nadie’. Raponi pegó una patada brutal en el borde del área. La fama de Pipino fue gracias a la patada de él”, reveló, en diálogo con ‘River Monumental’, por AM 1030 Del Plata.

Pese a que no pudo volver a River con Marcelo Gallardo como DT porque no se dio la coincidencia cuando cada parte quiso avanzar, Demichelis dejó en claro que le parece el mejor entrenador de la historia del club: “Hace un tiempo escuché una declaración de Ramón en la que él admitía que Marcelo lo había superado. Entonces, si lo dice Ramón, yo me saco el sombrero. Eso enaltece a Ramón y habla del buen tipo que es”.

“Ese día lo quería vivir como hincha porque uno como jugador profesional vive en un mundo irreal. Invité a mi mujer y a mi hijo. Me puse a renegar con el sistema de internet que es bastante complicado y por eso entiendo todo lo que hace el hincha. Presenciar ese momento con mi hijo y que dentro de 50 años pueda ‘decir yo vi a River campeón de la Libertadores en Madrid, ganándole la final a Boca’ es increíble. Mi hijo estaba sumamente emocionado. Estábamos enloquecidos. Cuando estamos juntos, volvemos a repasar esas imágenes y videos, se nos sigue erizando la piel”.