Julián Álvarez no para, es insaciable. El Mundial pasa, los partidos transcurren y se repite la fórmula goleadora del delantero que infla los pechos de orgullo de todos los hinchas de River. Y muchos se acuerdan de Marcelo Gallardo, claro que sí, porque fue el Muñeco quien moldeó a Julián para que sea el jugador de elite que es hoy. ¿El resto? Del propio protagonista, que aprende, crece y se supera día a día con humildad, perfil bajo y siempre con una sonrisa.
Hoy, en una semifinal de una Copa del Mundo y con 22 años, el oriundo de Calchín fue por escándalo la figura de la cancha, incluso por encima de Messi que hizo otro partido colosal e inolvidable. Con dos golazos, la Araña comandó a la Scaloneta hacia la tan ansiada final. Fue la punta de la lanza en la presión, nunca dejó de correr y al igual que en casi todos los partidos, todos sus esfuerzos con y sin pelota trajeron recompensa.
Quizás Julián todavía no está enterado, pero con su doblete frente a Croacia igualó un récord del mismísimo Pelé, ganador de tres Copas del Mundo con Brasil y uno de los mejores futbolistas de toda la historia. El ex River se convirtió en el jugador más joven en marcar por duplicado en la semifinal o final de una cita mundialista desde que lo había conseguido el mencionado crack brasileño, quien anotó con 17 años en Suecia 1958. Chapeau…
