El Millonario empató sin goles contra Olimpo, en Bahía Blanca, prácticamente no pateó al arco y continúa en zona de Promoción a falta de tres partidos para el final. Juan Pablo Carrizo, con pocas intervenciones, evitó la derrota.

Si antes del partido a River le decían que iba a igualar, seguramente hubiera aceptado. Porque el equipo, esta noche en Bahía, jugó uno de sus peores partidos, sin claridad ni calidad ni ganas para ir a buscar los tres puntos que lo sacaban de Promoción, pero a tres jornadas para el final, sigue con la soga al cuello.

El punto se basó exclusivamente en la buena tarea de la última línea y de Juan Pablo Carrizo, quien respondió bien después de una semana polémica. Además, también jugó la fortuna, después de dos remates de Rolle y Aguirre que dieron en los palos.

Ahora, el Millonario recibirá a Colón y deberá ganar para respirar un poco, aunque no depende de sí mismo, debido a que quedó a un punto de Arsenal y a tres de Tigre, con nueve en juego.