River volvió a perder, pero eso no es lo que más duele. Ver al equipo deambular en la cancha, transitar los 90 minutos sin alma y con errores conceptuales y de juego tan básicos, provoca desesperación pensando a futuro. El mercado de pases que se viene es la única manera de cambiar y volver a ser, porque hoy, no lo somos.
Gimnasia sobre la hora, Newell’s en el Monumental, los suplentes de Independiente, Boca en nuestra cancha, el papelón en Lanús y puedo seguir contando. River no es el River al que nos acostumbró el Muñeco.
Hoy nos convertimos en un equipo cortísimo, sin recambio. Los que entran están años luz de los titulares, la defensa parece perdida, agotada, como pidiendo a gritos vacaciones. Scocco juega por el resto y tiene que transformarse en asistidor, luchador y goleador. Así es muy difícil.
River funciona mal como equipo y acá es donde la solución tampoco aparece en las individualidades. Incluso los errores personales de cada jugador fomentan una bola catastrófica de furcios colectivos.
Y no pasa sólo por lo deportivo. ¿Acaso no tuvimos partidos con el River multicampeón del Muñeco que el juego no aparecía y entonces lo ganábamos a lo guapo, cerebralmente, comiéndole la cabeza a los rivales? Hoy esa confianza desapareció. Parece que el único que aún confía es Gallardo. Porque insiste con Casco, a Rossi le da otra oportunidad, y hasta a Andrade le da minutos. Pero ellos no. Casco la pierde en campo adversario y es gol de Gimnasia. Nadie ‘salva las papas’. Seamos sinceros, con River perdiendo ¿vos confiás que lo damos vuelta con el ingreso, de por ejemplo, Auzqui? Y no es por pegarle al delantero del Millonario, es sólo para graficar otra cosa que se perdió: la confianza.
Duele Millonario querido. Ahora se nos viene una doble chance única. Porque la final de la Copa Argentina nos encuentra en un momento futbolístico tétrico, pero tienen un par de días para volver a darse cuenta que tienen el escudo de River en el pecho. Que Gallardo es el que está guiándolos. Que nosotros somos los que vamos a copar Mendoza.
Y luego vendrá el mercado de pases. Y ahí será tarea de la dirigencia de no volver a errar. Tres arqueros fueron utilizados este semestre. Tres arqueros que quedó a la vista, no tuvieron la espalda que se necesita para pararse en el arco más grande del país. Ponzio tiene que jugar por todos, y Scocco no tiene socios. El año que viene estará nuevamente la Libertadores y esta camiseta merece ser respetada. No todo está perdido, dicen que el tiempo todo lo cura y que el fútbol da revancha. Bueno, hagan las cosas bien. Hagamos las cosas bien.
+ EN LA PLATA: Otra derrota que duele.
+ RENDIMIENTOS: Jugador x jugador.
+ FOTOS: Las imágenes del partido.
+ MERCADO DE PASES: ¿Quién viene? ¿Quién se va?
+ MAIDANA: Llegó a la quinta amarilla.
+ POSICIONES: La tabla del campeonato.
+ FIXTURE: Lo que viene para River.