El capitán de River lo es durante las 24 horas del día, no solo en los 90 minutos que dura un partido de fútbol. Y si hay alguien que reune todas las cualidades para ser un ejemplo es Enzo Pérez. Nunca una palabra de más, siempre acompañando a sus jugadores, reclamando cuando hay que hacerlo y defendiendo la camiseta con hidalguía y sacfricio. Por eso, sus buenos gestos fuera de la cancha tampoco sorprenden.
River se juega una parada difícil este miércoles en San Luis frente a Barracas Central por Copa Argentina. El Millo llega golpeado y necesita casi como el agua un triunfo, además de que una derrota lo eliminaría del certamen y le cerraría otro posible camino para acceder a la Libertadores 2023. Tras el partido con Godoy Cruz, se confirmó que Enzo tiene un desgarro en el isquiotibial derecho, pero eso no le impedirá estar cerca de sus compañeros.
Teniendo la opción de quedarse en Buenos Aires y evitar el desgaste del viaje a San Luis sabiendo que no puede jugar, Enzo igualmente optó por sumarse a la delegación del Más Grande, que partirá rumbo a tierras puntanas a las 19.00 desde el Aeruopuerto de Ezeiza y se hospedará en el Hotel Epic. El capitán nunca deja a su equipo, esa afirmación es sagrada en la forma de pensar del número 24 y queda a la vista.
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