Vuelve la paz a Marcelo Gallardo y sus planes en Ezeiza. Que se haya arruinado la burbuja sanitaria a causa del positivo del entrenador de arqueros, fue un susto que nadie veía venir al inicio de la pretemporada. Pero luego los estudios realizados en el primer día de esta semana, llegaron los resultados de los mismos y hubo un una tendencia única: todos fueron negativos.

Inicialmente, la burbuja de River que comenzó el pasado 24 de agosto, duraría una semana y terminaría el pasado sábado. El positivo de Olivieri trastocó todo e hizo que, desde que se conoció la noticia, todos permanecieran en el hotel, encerrados en sus habitaciones, sin compartir espacios en común-excepto el mencionado “corredor seguro”-,ni tampoco compartir comidas.

Se dispuso que habrían dos ola de testeos. Una cuyos resultados se conocieron en las últimas horas y una posterior, para asegurar, el próximo jueves. Mientras tanto, el plantel seguirá entrenando en la zona nombrada anteriormente dentro del Holiday Inny no volverá a River Camp.Desde que se reveló el positivo de Olivieri, desde adentro del hotelsostuvieronque ningún integrante más de la delegación presentaba síntomas de coronavirus. Los testeos marcaron que, por ahora, tampoco hay nadie asintomático que esté cursando la enfermedad.

Nuevamente la mira torna hacia la Copa Libertadores y el viaje a Brasil del 17 de septiembre. A poco de más de dos semanas y con San Pablo tomando cada vez más ritmo por el certamen local que está disputando, Marcelo Gallardo no quiere más contratiempos y deberá aprovechar los días restantes lo máximo posible. Así que por ahora, a entrenarse en el hotel y rezar que este viernes se repitan los resultados de los testeos PCR.