La mañana de River en el predio de Ezeiza comenzó de manera accidentada. Tras una entrada en calor que el plantel realizó, un grupo de futbolistas hizo trabajos con pelota en espacios reducidos. Y lamentablamente, Benjamín Rollheiser se retiró lesionado.

El delantero fue a presionar en una jugada, no pisó bien y cayó al suelo. Inmediatamente, Marcelo Gallardo lo asistió y luego llegaron los médicos, quienes lo sacaron de la cancha para asistirlo rápidamente.

El delantero festeja su gol en la definición por penales ante Gimnasia (Mendoza) por la Copa Argentina 2019. Fue la noche de su debut oficial.

Al joven de 19 años, quien el fin de semana pasado fue titular y marcó un gol en el triunfo por 3-2 de la Reserva ante Banfield, se lo vio con muchas muestras de dolor. Y finalmente se confirmó el peor diagnóstico: sufrió una rotura de ligamento cruzdo dela rodilla izquierda por la cual deberá ser intervenido y tendrá al menos para seis meses de recueración afuera de las canchas.

No es la primera vez que el delantero que tiene contrato hasta junio del 2022 (su cláusula de salida es de 20 millones de euros) debe soportar un problema físico. Ya pasó por un incoveniente lumbar que lo tuvo parado durante un largo período y en octubre del año pasado ya había sufrido un esguince en la rodilla izquierda por el cual estuvo un mes sin jugar.

¡Fuerza, Benja!