Se cumplió un siglo de la primera epopeya de la historia de River: el 12 de septiembre de 1909, el equipo darsenero lograba derrotar como visitante al glorioso y multilaureado Alumni con un tanto anotado por Hernán Rodríguez en la cancha del Club Banco Nación en el barrio de Colegiales.
A River le tocó jugar contra el todopoderoso Alumni por la undécima jornada del campeonato. Vale recordar que si bien el elenco riverplatense era un recién ascendido, su desempeño en la máxima categoría era el comentario de todos. Había sido justamente el Alumni el que en la cancha de la Dársena Sud le había quitado el invicto a River con un 1-3 que terminó con una racha inicial de cuatro triunfos y dos empates. Por eso, la muchachada darsenera se había preparado con todo para la revancha. Si bien existía una notoria admiración hacia los jugadores del Alumni, también es cierto que ellos se sabían jugadores de primera línea y estaban convencidos de que podían jugar de igual a igual contra sus admirados fenómenos. Una multitud para la época, nada menos que 2500 personas, fueron a Colegiales a ver el encuentro, a pesar de que había llovido mucho sobre Buenos Aires en las horas previas. El partido prometía mucho.
El primer equipo de River formó con: Raúl Capdevielle; Arturo Chiappe y Federico Gómez; Bernardo Messina, José Morroni y Franco Chagneaud; Elías Fernández, Jhonny Diggs, Hernán Rodríguez, Santiago Sayanes y Anempodisto García. En este once, que consiguió una resonante victoria, la primera de la brillante historia riverplatense, hay que destacar a Elías Fernández, el primer jugador riverplatense en jugar en una selección argentina, Arturo Alejandro Chiappe, todo un emblema de River y su máximo ídolo en el amateurismo, José Morroni, un caudillo con todas las letras, y Bernardo Messina, uno de los fundadores del club, ilustre riverplatense que además fue arquitecto y participó en las construcciones de todas las canchas de River, Monumental incluido. Como anécdota, vale destacar que el árbitro fue otro prócer de la historia de River Plate, Enrique Salvarezza, fundador, socio, canchero, secretario, cobrador y todo lo imaginable que pudiera necesitar el club. Salvarezza era además un admirador del Alumni, por lo que era respetado por todas las glorias de ese equipo. De más está decir que su desempeño en el encuentro fue de una estricta imparcialidad, lo que fue alabado por vencedores, vencidos y la prensa de la época.
Volviendo a ese inolvidable 12 de septiembre, el tanto logrado por Hernán Rodríguez, llegó a los 25 minutos, tras un centro de Elías Fernández que fue desviado con la cabeza por Sayanes. La resistencia de River fue heroica, aunque también es cierto que pudo aumentar el marcador en un par de oportunidades. Según destacó el diario La Argentina del día siguiente, “Alumni cayó vencido, por primera vez en esta season (sic) por River Plate, team que, con justicia, fue ayer superior a su rival. En este encuentro no intervino para nada la casualidad, ni tampoco hubo suerte o desgracia para uno u otro cuadro, pues River Plate demostró de manera bien palpable que su victoria es merecida”.
La imaginable emoción de los jugadores de River tras el pitazo final de Salvarezza, fue acompañada por una ovación y aplauso de los integrantes del Alumni, a pesar del evidente golpe sufrido. Fue la única derrota sufrida por el campeón en su conquista de ese 1909, por lo que su repercusión fue tan extraordinaria que hasta fue reflejada por medios europeos del momento. De más está decir que el barrio de la Boca y la Dársena Sud se vistieron de fiesta tras el inolvidable triunfo riverplatense. Sus jugadores y directivos fueron agasajados por la gente con un gran banquete. Habían entrado definitivamente en la historia grande del fútbol argentino, en lo que constituyó uno de los más importantes pilares de la gran gloria y la inmensa popularidad del club más laureado de fútbol nacional.
Imagen: archivo PN