El partido entre River y San Lorenzo era especial para Iker Muniain. Es que siendo hincha del Millonario y con la chance frustrada de llegar al club, debía visitar el estadio Monumental con la camiseta del Ciclón. Y para colmo, convirtió un gol: así fue su festejo.
A los 21 minutos del segundo tiempo, y poco tiempo después de que el equipo de Gallardo logre ponerse en ventaja, Leandro González Pirez cometió un penal. Y el encargado de ejecutarlo fue el ex Athletic Bilbao, quien tomó la pelota sin dudar. Con un remate sutil abriendo el pie, engañó a Armani, que fue hacia el otro lado, y empató.
Rápidamente sus compañeros se le fueron encima para festejar el tanto. Pero el vasco de 31 años no pudo abstraerse de sus sentimientos hacia River. No lo gritó. Apenas esbozó un grito de aliento para su equipo. Es hincha del Más Grande y todavía mantiene vivo el sueño de ponerse el Manto Sagrado.