El cambio de River fue drástico en las últimas semanas. Pasó de ser un equipo apático, sin funcionamiento colectivo, sin contundencia, sin reacción y con bajos niveles individuales. Hasta que algo se destrabó y ahora gana, gusta y golea. Luego del triunfo ante Barracas por el Torneo Apertura, Marcelo Gallardo reveló la clave del éxito: “Magia“.
En un curioso cierre de conferencia de prensa, el Muñeco volvió a ser consultado sobre cómo hizo para revertir aquel mal momento. Y MG, algo fastidiado por la reiteración de esa cuestión cada vez que le toca hablar, respondió con ironía: “Magia, muchachos… Saqué una varita e hice magia”.
Instantáneamente después, Gallardo volvió a la seriedad y sentenció: “Trabajo, mucho trabajo y convicción. No hay otra razón”. “Abatido no estuve nunca. La vida es más dura que si no podemos ganar dos o tres partidos seguidos, o si la pelota entra o se va afuera”, reflexionó.
Gallardo, feliz y satisfecho: “Fue un fiesta”
“El equipo jugó muy bien hoy”, exclamó el Muñeco en conferencia de prensa. Pese a que River sabía “que iba a ser duro”, logró imponerse sin sufrir demasiado. En ese sentido, el DT se mostró muy conforme: “Todo el equipo fluyó de forma satisfactoria para nosotros y los hinchas, que vivieron una fiesta porque el equipo los representó”.
Al margen de lo colectivo, Gallardo también dejó en claro que el nivel individual de los jugadores ayuda al todo. “Las buenas individualidades hacen que el equipo crezca, y eso hace que el equipo juegue como lo hizo estos últimos partidos. Cuando cada individualidad mejora, el equipo mejora. Eso nos pone en una intención de mejora permanente”.
“Estábamos trabajando para que el equipo funcione de la mejor manera”, continuó el DT. Acto seguido, añadió: “Soy autocrítico, pero observaba buenas cosas. Sabía que el equipo se iba a soltar como lo hizo. Me pone contento ver al equipo como juega ahora. En el futbol argentino es difícil generar una superioridad como la que tuvimos. Hay que mantener el buen funcionamiento”.
