Marcelo Barovero lleva grabado cada momento que pasó con la camiseta de River. Y el hincha sin dudas que también. El penal que le sacó a Emmanuel Gigliotti, en la semifinal de vuelta de la Copa Sudamericana 2014, fue un momento bisagra para la historia del Millonario y también en la carrera de Trapito.

Pero, ¿el arquero se volvió a cruzar al entonces delantero de Boca en algún momento? Fue la pregunta que el cordobés le respondió a La Nación: "Volvimos a enfrentarnos en un amistoso en Mar del Plata y hace poco en México, en Monterrey-Toluca, y ahí estuvimos charlando un rato antes de entrar al campo. En el fútbol de hoy se busca un culpable, tiene que saltar un fusible, pasó bastante en los últimos tiempos en Boca, y la ligó Gigliotti. Por suerte ha demostrado que es un gran jugador y salió adelante".

A su vez, Barovero relató cómo fue que pasó las horas previas a aquella semifinal frente al eterno rival: "Era un partido clave, lo sabíamos todos, y yo lo viví muy intensamente durante todo ese día: había que ganarlo y no me podían hacer goles. Me enfoqué en eso: había que ganarlo y no me podían hacer goles. Lo hablé a la tarde con mi hermano. 'Hoy tiene que ser el día', le dije. Recordé lo que me había contado Lechuga Roa, cuando era ayudante de Almeyda: cómo se había mentalizado antes de esa noche mágica de penales atajados que tuvo con el Mallorca. Eso también me dio fortaleza".

En tanto, Trapo confesó que antes del partido chequeó videos de Gigliotti ejecutando penales: "Cuando cobraron el penal creo que miré dónde estaba la puerta para irme. Acá no había VAR así que no quedaban dudas de que era penal. Me alejé de la jugada, traté de clarificar la mente, estar lúcido, empecé a tomar aire como nos había enseñado Sandra Rossi. A la mañana habíamos analizado los penales de Gigliotti con Nahuel Hidalgo y Tato Montes. Gigliotti tenía muchísimos penales pateados en Colón, San Lorenzo y Boca, y los vi".