“Veo que entre todos estamos destruyendo un ícono como es el River-Boca. Estamos permitiendo que no lo podamos organizar en nuestro país cuando teníamos el orgullo de decir que íbamos a jugar una final los dos equipos más grandes del fútbol argentino”. Gustavo Alfaro es técnico de Huracán, pero también integra hace muchos años el mundo de fútbol.
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Y como hombre destacado en este deporte que tanto apasiona a la República Argentina, el entrenador manifestó su disconformidad y bronca por el exilio del Superclásico entre River y Boca hacia otro continente: “Nos estamos dejando robar el clásico. Nos están robando algo argentino como si dijeran que el día de mañana no se pueda bailar tango o que en calle Corrientes no se permitan los teatros”.
“Como hombre del fútbol, me da vergüenza el fútbol, me da asco. No podemos permitir esto, estamos siendo cómplices”
A su vez, Alfaro también se mostró en desacuerdo sobre la posibilidad de que la final se resuelta en la oficinas de Conmebol, tal y como lo solicitó pedido Boca: “Yo la verdad, ponerme una medalla con un campeonato ganado en un escritorio no tiene valor.
