Iban ocho minutos de la segunda parte cuando Enzo Pérez sintió dolores en el recto anterior de la pierna izquierda y tuvo que ser reemplazado por Leonardo Ponzio. Pese a realizar un buen partido frente a Racing, el mediocampista no pudo ocultar su bronca por el imprevisto que no lo dejó culminar el clásico con normalidad.

Visiblemente molesto, el mendocino golpeó el banco de los suplentes y se mostró resignado del otro lado de la línea de cal. De todos modos, al finalizar el encuentro mostró una sonrisa ante la gente que lo aplaudió en su camino hacia el vestuario local.

El parte médico arrojó que Pérez padece una molestia muscular en la zona afectada y Gallardo reconoció que posiblemente no contará con el mendocino para la próxima fecha.