Que la final de la Copa Libertadores se tenga que definir en otro país, y que justo sea en España, es una verdadera vergüenza. No sólo por la historia, y por lo que ha masacrado España a los nativos que vivían en Sudamérica antes de la llegada de Cristobal Colón y compañía, sino también porque le arruinaron la fiesta a casi 70.000 hinchas de River, que querían ver uno de los duelos más importantes de la historia, frente al eterno rival, en el Monumental.

A pocas horas de que se juegue esta final en Madrid, que tendrá lugar a las 16.30 horas de Argentina (20.30 de España), Alejandro Domínguez le concedió una entrevista a Marca y contó que la intención de la Conmebol siempre fue que el encuentro no se juegue en el exterior. Pero, ¿qué pasó para que tengan que tomar esta insólita y bochornosa medida?

“La intención siempre fue jugar en Argentina. De hecho, intentamos que se jugara el 24 y el 25 y no se dieron las condiciones. Lo más importante siempre es garantizar que lleguen en igualdad de condiciones deportivas. Con el G20 en Argentina, teníamos que encontrar un campo neutral. Madrid conjuga todo lo que necesitamos para que este partido se juegue, pero claro que hay cosas que mejorar. El mayor triunfo es que el fútbol siempre va a ganar a los violentos. El partido se va a jugar y la pelota no va a parar. Al fútbol no se gana con violencia”, sostuvo el presidente.

Pese a las críticas, el paraguayo explicó que no se avergüenzade haber traído la final de la Libertadores a Europa: “Es una excepción. No es intención de Conmebol sacar la final de Sudamérica. Se jugó la ida en Argentina y, durante la vuelta, no se dieron las condiciones porque había un equipo que tenía futbolistas que no podían jugar. Ante una excepción, hemos venido a Madrid, pero el próximo año la final de la Libertadores se jugará a partido único en Santiago de Chile. Creo que momentos excepcionales necesitan decisiones y soluciones excepcionales”.

A su vez, el Domínguezresaltó la razón por la cual eligieron a Madrid como sede: “El estudio que hicimos fue en función a la neutralidad que buscábamos. La población más grande de argentinos viviendo fuera del país está en España y Barajas es el aeropuerto de mayor conectividad con América. El único lugar donde podíamos salir y que los argentinos pudieran disfrutar de este espectáculo era Madrid. Tuve una conversación con mi amigo Florentino Pérez para preguntar su opinión como hombre de fútbol, de si era viable o no. La primera respuesta fue: ‘dame dos minutos que te devuelvo la llamada’. Pasado ese tiempo, me dijo: ‘Me encanta la idea, me parece excepcional y el Bernabéu está disponible para ella'”.

En cuanto a la seguridad, el dirigente aseguró que no habrá inconvenientes de seguridad, como sí lo hubo en la previa del partido que se iba a jugar en el Monumental: “Yo confío en la Policía y las autoridades españolas. Es un partido que se decide con goles. Se gana y se pierde. Es el deporte y el próximo año volverá a rodar la pelota y quien pierda tendrá su revancha”.

¿Considera que debe haber una medida ejemplar contra los barras? “Estoy convencido de que tiene que haber medidas ejemplares. Lamentablemente, Conmebol no puede legislar en un gobierno. La violencia en el fútbol no es algo que esta ocurriendo únicamente en Sudamérica, está pasando en otras sociedades y en otros continentes. Su lucha tiene que venir desde arriba y tiene que haber una fórmula que podamos copiar y adecuar para que se entienda que es un deporte y que no hay lugar para los violentos”, sostuvo.