Nicolás De La Cruz comienza a cambiar murmullos y dudas por aplausos. Tras un año y ocho meses desde su arribo a River luego de una inversión que demandó tres millones de dólares por el 30% de los derechos económicos, el mediocampista empezó a exhibir las cualidades que tanto cautivaron a Marcelo Gallardo cuando lo vio jugar en la Selección Sub 20 de Uruguay y en Liverpool de Montevideo.

"La verdad que estoy muy contento. Creo que ha llegando el momento en el que siento mucha confianza dentro del campo y creo que se vio demostrado en los últimos dos partidos", manifestó De La Cruz, en rueda de prensa. "Al sumar minutos uno se siente con mucha confianza, entonces sabe que lo puede repetir durante partidos seguidos y eso es clave", agregó.

Consciente de que la irregularidad era habitual en su desempeño, Nico reveló que eso lo inquietaba: "Me sentía en el debe conmigo mismo porque sabía que podía rendir mucho más". Y confesó: "El tema físico era mi debilidad. El tiempo de adaptación ya pasó, entonces me tuve que enfocar en el tema físico para después aportarle con la pelota al equipo".

¿Cómo fue el proceso para mejorar? "Venía trabajando en silencio para estar preparado cuando me tocara. Siempre sentí el respaldo de mis compañeros y el cuerpo técnico. Ahora siento que el nivel está en alza, así que espero aprovechar este momento para seguir rindiendo", explicó De La Cruz. "No es un cambio de un día para otro, es un cambio que venimos trabajando hace rato", añadió.

Además de la mejora física ("me siento más cómodo y con mucho más aire para aportar lo que el equipo necesite", comentó), el hermano de Carlos Sánchez resaltó el valor del golazo que hizo en Porto Alegre ante Internacional: "El gol te sube la autoestima. Te deja con muchas ganas y con mucha confianza para volver a agarrar la pelota e ir para adelante".

Con respecto a la ilusión de ser citado para la Mayor de Uruguay, De La Cruz prefiere ser cauto e ir poco a poco: "Vamos a ir paso a paso, recién me estoy afianzando en el club. El sueño de uno es ir a la Selección. Por ahora, no hablé con nadie".

Antes del viaje a Salta para jugar ante Argentino de Merlo por un lugar en los 16vos de final de la Copa Argentina, el volante ofensivo recalcó que de ninguna manera hay que subestimar al rival: "Dentro del campo somos once contra once, puede pasar cualquier cosa. Lo afrontamos con mucha seriedad, con muchas ganas e ilusión por seguir con este camino de la victoria que es muy importante para nosotros".