Lionel Scaloni confirmó hace pocas horas la lista de la Selección Argentina para la Copa América 2024 con ocho jugadores vinculados a River aunque podrían haber sido nueve con Lionel Messi si es que aquel día de 2000 en el que dirigentes del Millonario lo esperaban para ficharlo, no hubiese recibido la respuesta inapelable que le dieron en Rosario y que cambió el curso de la historia.

La respuesta a la pregunta de por qué Lionel Messi no fue fichado por River es concreta, la dio el mismísimo mejor jugador del mundo y nada tiene que ver con el mito de que alguien en River se negó a pagarle el tratamiento hormonal que “La Pulga” necesitaba. Por el contrario, después de las dos pruebas que Leo hizo y en las que deslumbró a todos, en el club se comprometieron a costear el procedimiento y le pidieron que volviera con el pase ya para ficharlo, pero el día que lo esperaban para eso, el 10 no llegó.

Antes de todo esto, hubo dos pruebas.

Los días de 1999 en los que Lionel Messi se probó en River

A fines de 1999, tres chicos de la categoría 87 de Newell’s fueron ofrecidos por Francisco Vairo, formador de las inferiores de La Lepra, a la filial que River tenía en Rosario. De uno de ellos nunca se conoció el nombre, mientras que los otros dos eran un delantero con porte clásico de N°9 llamado Leandro Giménez y un 10 de contextura mínima llamado Lionel Messi.

Los chicos viajaron desde Rosario hasta Buenos Aires en un Fiat 147 para realizar la primera prueba que se hizo en canchas del predio de Ciudad Universitaria, cercanas al Monumental, y quien estuvo a cargo de la misma fue Eduardo Abrahamian, entonces responsable de las divisiones infantiles de River, quien preparó dos equipos, con la particularidad de que dejó a Lionel Messi en el banco de suplentes de uno de ellos.

De aquel día Leandro Giménez, el delantero que viajó con Messi y que había comenzado como titular, contó en una entrevista que dio a TyC Sports: “Leo arrancó en el banco, entró en el segundo tiempo y en la primera jugada recibe la pelota de espalda en la puerta del área, hace un movimiento, se pone de frente al marcador central, le tira un caño, patea al arco y obviamente fue gol“.

Leandro Giménez, con el N°7 en el short, y Lionel Messi, en el medio de la fila de abajo, parte de la histórica categoría 87 de Newell’s.

Leandro Giménez, con el N°7 en el short, y Lionel Messi, en el medio de la fila de abajo, parte de la histórica categoría 87 de Newell’s.

A los tres chicos les pidieron que regresaran a la semana siguiente y por supuesto Giménez, pero fundamentalmente Leo Messi, que “siempre pedía la pelota, siempre la quería tener”, dijo Abrahamian, fueron titulares esta vez y ese día, además, el otro punta que jugó en el equipo fue nada menos que Gonzalo Higuaín.

De aquella segunda prueba, Giménez relató: “Fue una muy buena práctica. Lionel se lució con sus jugadas. Ganamos 14 o 15 a 0 y Leo hizo 8, 9 o 10 goles, quedaron encantados con él, no lo podían creer porque era muy chico y jugaba así. Terminamos de hacer fútbol y nos dicen que a tal fecha del año siguiente nos presentáramos a la pretemporada”, recordó.

Así jugaba Lionel Messi en Newell’s cuando fue seleccionado para probarse en River

Estaba todo listo. En uno de los dos viajes que Lionel Messi hizo de Rosario Buenos Aires fue acompañado por su papá, Jorge, y en el otro por Francisco Vairo, el que lo había elegido junto a Leandro Giménez y otro chico de aquella ya legendaria 87 de Newell’s.

¿Por qué Lionel Messi no jugó en River? Su respuesta

“El tema de River, yo estaba en Newell’s, fui a probarme a River por un técnico que había en ese momento en Newell’s, estaba la escuela de River en Rosario, jugué 15/20 minutos y me dijeron ‘volvé dentro de 10 días con tu categoría‘. Y volví a los 10 días, hicieron un partido, me acuerdo que hice como tres o cuatro goles, y me dicen ‘no, te tenés que quedar, hacé esto, esto’, yo le digo ‘¿qué hay que hacer?’, y me dicen ‘no, traé el pase y hacemos todo’. Estaba el tema de mi tratamiento también, me dijeron que me iban a ayudar, ‘nos vamos a hacer cargo del tratamiento’, cosa que Newell’s no me bancó en ese sentido, nunca me pagó el tratamiento. Mi vieja renegaba para que nos puedan ayudar con el tema de mi tratamiento, entonces era complicado en esa época y cuando fui a buscar el pase a Newell’s me sacaron cagando. Peleamos, peleamos, el pase nunca me lo dieron y después salió todo lo de Barcelona”.

Lionel Messi no pudo quedar en River… ¿Y Leandro Giménez?

Leandro Giménez, el 9 portentoso de la 87 de Newell’s que se probó en River junto a Lionel Messi, quedó en el Millonario. “Vine de nueve, pero terminé de ocho porque tenía delante a Higuaín”, contó el propio exdelantero rosarino en una entrevista que dio al diario Perfil. “Abrahamian, que me quería mucho, siempre le decía a mi padre que yo era el Coudet morocho. En River me fue bien durante un año y medio.”

Leandro Giménez, el delantero de la Categoría 87 de Newells que se probó en River junto a Lionel Messi en 1999.

Leandro Giménez, el delantero de la Categoría 87 de Newells que se probó en River junto a Lionel Messi en 1999.

Fue después de ese tiempo cuando Giménez, entonces de 15 años, sufrió una fractura en el quinto metatarsiano de un pie y en el club decidieron no operarlo con el argumento de que aún estaba en etapa de crecimiento. Pero apenas se recuperó de esa lesión se volvió a fracturar y allí sí decidieron operarlo. “Me tuve que ir a la pensión, porque estaba con muletas y yeso y, si no, no podía ir a clase en el instituto de River, donde estudiaba. Estaba solo a la mañana, porque mis compañeros se levantaban y se iban a entrenar. Por suerte estaba el Mundial 2002 y aunque sea me entretenía con los partidos. Cuando me recuperé, me seguí entrenando pero ya no me tenían en cuenta. Estaba en Séptima. Y a fin de año me dejaron libre. Ya no les servía, estaba todo roto”, lamentó.

¿Y su relación con Messi cómo quedó? “Después de que lo esperamos el día que nos iban a fichar y no llegó, al poco tiempo supimos todo lo de Barcelona, que había firmado ese contrato en esa servilleta y demás”, dijo, y agregó: “Antes de irse a Barcelona me dejó su teléfono, pero nunca lo llamé. No sé por qué”.