El primer paso para superar un trauma es la aceptación, dicen los que entienden de terapia y de psicología. Y ese es el camino que parece haber elegido Agustín Rossi para dejar atrás su etapa como arquero de Boca y enfocarse en su presente con el Flamengo de Brasil. Su salida del club de la Ribera no fue del todo feliz, más allá del nivel que mostró en sus últimas temporadas en el eterno rival. Como sucedió con la gran mayoría de los protagonistas de la Final Eterna en Madrid, una definición que dejó secuelas imborrables en el tiempo.
Vestido con una camiseta negra con detalles blancos y rojos, el ex guardametas del Xeneize se prendió a un ping pong de preguntas y respuestas en las que habló de todo. Una de las primeras consultas tuvo que ver con el mejor equipo de la actualidad en la Argentina. El arquero no dudó y señaló a River: “Está bien consolidado, armó un gran equipo que se ve reflejado en la cancha”, explicó Rossi en el mano a mano con el reconocido influencer Ezzequiel.
El acto de honestidad más brutal de Agustín Rossi llegó a la hora de recordar los duelos superclásicos y de elegir quién es el delantero que más lo complicó: “Por determinación y los goles que me hizo, elijo al Pity”. Y tampoco tuvo demasiados problemas a la hora de señalar el estadio más complicado para jugar: “Por la dimensión y por la gente, podría ser el Monumental”.
