El River de Martín Demichelis dolorosamente sumó un nuevo papelón a la lista en lo que va del año. Por la séptima fecha de la Liga Profesional, el Millonario cayó por 2 a 1 ante Godoy Cruz, un equipo que venía de marcar apenas dos goles en seis fechas y que en cuestión de cuatro minutos le anotó la misma cantidad a River esta noche.
Y podrían haber sido más de no haber sido por Franco Armani y la propia ineficacia del Tomba. Ningún jugador estuvo a la altura de lo que se le exigía a River en este partido, así como tampoco hubo respuestas (como en gran parte del año) desde el banco de suplentes. La imagen de Martín Demichelis, desconcertado y perdido, es el reflejo de lo que muestra el equipo en la cancha.
Sin ver ni siquiera una muestra de rebeldía de los jugadores, los miles de neutrales que dijeron presentes en las tribunas del Estadio Malvinas Argentinas explotaron contra los futbolistas y entonaron la tradicional canción: “Jugadores, la c*** de su madre, a ver si ponen huevos, que no juegan con nadie“.
Representando a los millones que siguen a River desde distintas partes del país y del mundo, la gente dejó en claro el mensaje: así no se puede seguir, ni en el torneo local y mucho menos en la Copa Libertadores, donde el Millonario tiene que enfrentar a Talleres de Córdoba en poco menos de tres semanas.
Ese tema sonó a los 35 minutos de la segunda parte. Apenas unos minutos después, también bajó el “Movete, River, Movete” desde una de las populares del estadio en Mendoza. En ningún momento de la noche dio la sensación de que River pudiera empatar o dar vuelta el partido, por eso la gente se hartó.