Rodrigo Villagra es fanático de River y nadie puede tener dudas. El volante no lleva ni siquiera 24 horas como futbolista del Más Grande (firmó su contrato el sábado por la tarde) y ya se encargó de dejar en claro de qué club es hincha. En realidad, lo había hecho hace 10 años, allá por 2014 con una foto frente a un espejo con la camiseta de River y la frase “Orgulloso de ser de River Plate”.

Diez años después, el destino de aquel pequeño pibe que soñaba con jugar al fútbol se unió con el del talentoso volante que viene de ser figura en Talleres de Córdoba. “Acá habla Rodrigo Villagra, le quería mandar un saludo a toda la gente de River, estoy muy feliz de estar acá“, se pronunció el mediocampista a través de las redes oficiales, algo nervioso todavía.

Lo que hizo explotar a la gente no fueron las placas que publicó River para su presentación, sino la foto que se sacó Rodrigo Villagra frente al espejo. Sí, el cordobés recreó la imagen que se hizo viral desde que empezó a sonar para River y salió casi igual: agarró su teléfono, se puso frente al espejo en el vestuario en el Monumental y sacó la foto.

Los sueños se cumplen“, escribió River en su cuenta oficial, adjuntando ambas imagenes. Villagra tenía varias fotos en su vieja cuenta de Facebook junto con la camiseta del Más Grande, pero la que se hizo viral fue una sola y por eso el ingenio para traerla de nuevo “a la vida” en su presentación.

Villagra, una familia futbolera… y de River

Diego, el más grande de los hermanos Villagra, jugó en Rosario Central y en otros nueve clubes del fútbol argentino. Cristian, el “Kity”, lo hizo en otros tantos y, lo dicho, fue campeón con River en el Clausura 2008. Gonzalo no se dedicó al fútbol, pero era fanático del Más Grande. Y Rodrigo, el menor, es el talentoso volante central que continuará la historia que los une con la Banda, herencia del fanatismo de Zulema y Carli, madre y padre de los Villagra.

Zulema y Carli Villagra. Fanáticos de River  (Foto: Facebook/ zulema.ferreira.1)

“Somos una familia futbolera. Estábamos todo el día pateando la pelota, no le dejamos una planta sana a mi vieja, pobre… Y bueno, el fútbol nos unió y ahora nos mantiene fuertes”, reconoció.