El nivel de exposición para los jugadores juveniles, no solo en el fútbol argentino sino a nivel mundial, es cada vez mayor. La transmisión y difusión de los distintos torneos que se llevan a cabo, sumado a la masividad de las redes sociales lleva a que se hablen maravillas, se saquen conclusiones y se etiquete de cierta forma (a veces de forma apresurada) a chicos con mucho talento para jugar al fútbol pero que no dejan de ser eso: chicos.

En materia juvenil, en River no se habla de otra cosa que no sea Claudio Echeverri. El Diablito irrumpió en Reserva a fines de 2022, se asentó, comenzó a romperla y ahora llevó su capacidad a otro nivel, al ser una de las máximas figuras de la Selección Argentina Sub-17 que avanza a paso firme en el Hexagonal Final del Sudamericano.

Post partido con Gimnasia, a Martín Demichelis le consultaron sobre el presente del Diablito y pidió mesura para con la gente. Reconoció que la expectativa es alta, pero hizo foco en su corta edad y todo lo que tiene por delante todavía: “Echeverri tiene el ADN River pero hay que bajar las expectativas, hay que entender que es un jovencito. Está por buen camino pero hay que acompañarlo“.

La Albiceleste venció a Venezuela ayer por la tarde y quien tomó los micrófonos luego del partido fue el Diablito. Con total sinceridad y una naturalidad impropia de un chico de 17 años, describió cómo está viviendo el boom que lo tiene como protagonista: “Estuve hablando con mi familia. Me están pasando muchas cosas y siendo tan chico, a veces siento mucha presión de la gente y me estreso. Es lo que me tocó y tengo que convivir con esto que es un montón”.

Es muy fácil marearse siendo tan joven y en un fútbol argentino que es cada vez más complicado para sobrellevar. Por eso fueron muy acertadas las declaraciones de Demichelis y no queda duda que River será sosten del Diablito y acompañará su crecimiento en todo momento y sin apurarlo.