Alario no se operará y los trabajos de kinesiología sobre su hombro tienen como objetivo que el futbolista llegue al juego de ida ante Chapecoense, por los Cuartos de Final de la Copa Sudamericana.
Lucas Alario fue uno de los protagonistas de los últimos días en River. Esta vez, no por un gol de gran relevancia, sino por el miedo generado por una luxación en el hombro derecho. Afortunadamente, y, luego de los estudios pertinentes, el viernes pasado se determinó que no será operado, al menos en el corto plazo.
Los médicos de River, con el amparo del propio futbolista y de Marcelo Gallardo, comenzaron a aplicar un tratamiento kinesiológico en el hombro del artillero surgido de las divisiones menores de Colón de Santa Fe. En un primer momento se habló de que el mismo tendría un mes de duración, pero el optimismo podría acortar los tiempos.
El objetivo es tener listo a Alario, pieza clave en el esquema actual del Muñeco, para el choque de ida frente a Chapecoense, por los Cuartos de Final de la Copa Sudamericana. El mismo se desarrollará el próximo miércoles 21 de octubre en el Estadio Monumental.
La idea es fortalecer la zona del hombro derecho con la meta de que el futbolista no sufra una nueva luxación. Cabe destacar que en Colón tuvo tres episodios de este calibre antes de operarse del hombro izquierdo y estar alrededor de seis meses afuera de las canchas.
Por supuesto, Alario no será exigido y arriesgado en el certamen doméstico, ya que los objetivos claros del Millonario tienen que ver con el mencionado certamen continental y el Mundial de Clubes. Mientras tanto, el Pipa espera y trabaja con una férula en la zona afectada.
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