(Incluye video) Héctor Rodolfo Veira, el único técnico que logró la Copa Intercontinental con River, dio a conocer intimidades sobre la previa y el partido histórico contra Steaua Bucarest en 1986.
Si a River no le faltan títulos en la vitrina es porque, hace 29 años, se logró el título mundial de la mano de un plantel exquisito comandado por alguien que quedó en la historia grande de River: Héctor Rodolfo Veira.
El Bambino, en la previa del Mundial de Clubes que arrancó este jueves, dialogó con Canchallena y recordó aquella final histórica frente a Steaua Bucarest: “Eran prácticamente la selección de Rumania y le habían ganado la final de la Copa de Europa a Barcelona por penales tras igualar 0-0. Sabía que era un rival duro”.
No me quedó ninguna foto de aquel día. Tengo todavía la medalla y un buzo de River que me puse debajo de la camisa
Incluso, el extécnico de River contó que comenzó a imaginar la final apenas logró la Copa Libertadores contra América de Cali. “A los pocos días empecé a trabajar el partido contra el Steaua de Bucarest, no quería dejar detalle librado al azar”, indicó.
¿Cómo preparó al equipo? Los hizo trabajar durante semanas para este partido: “Practicábamos en el Monumental y yo le pedía a Juanjo Borrelli que jugara de Boloni para que la defensa lo tomara. No sabés las patadas que le pegaban, ja. Lo quería traer a Carlitos Babington, porque era zurdo como él. Le decía que nos viniera a dar una mano, después no se concretó. Cuando jugamos, Boloni fue al banco, estaba lesionado. Los muchachos se me mataron de risa”.
Los hinchas de River todavía me agradecen la Libertadores y la Intercontinental
“A Monte (Alejandro Montenegro, lateral izquierdo de aquel partido) le ponía a Caniggia, que era bien pibe, para que lo atacara en los entrenamientos. Le decía ‘si vos lo marcás a Caniggia, que es el hijo del viento, a Lacatus te lo comés, Monte”, agregó.
En la arenga previa no necesitó dar consejos futboleros. “Les di a entender que era el partido de nuestras vidas. Yo no preparo los discursos, soy una persona de explosión, de energía. Te mandaba todo directo. Les hablaba de la triple corona. Campeonato, Libertadores e Intercontinental, como había ganado en Europa el Real Madrid. Los grandes ganan la triple corona, les decía. Y River es un grande. Vamos a ganar la triple corona. Veía que estaban motivados. Entraron a la cancha y se les veía ese hambre de gloria”, remarcó.
Para redondear un día perfecto, el gol del título llegó por una falla de los rumanos que el Bambino logró detectar: “En el video, le buscaba defectos a Steaua y vi uno. Cuando cometían una infracción le daban la espalda a la pelota. Eso lo conversamos con el Beto Alonso, con Alzamendi, con todos. A los 5 minutos, el Beto se la da rápido a Alfaro, quien patea y ataja el arquero. A los 28, vuelven a darle la espalda, el Beto se apura con la picardía del potrero, se la pone a Alzamendi y gol de River. Me puse muy feliz que el tanto de la victoria llegara por esa vía”.
+ El gol de Alzamendi:
“‘Con esto, ya está, quedan para siempre en la historia de River, es la triple corona, ya está’, les dije”, recordó. Y no le falta razón. Esa estrella todavía brilla en Núñez. ¿Cómo no ilusionarse con repetirlo este año?