Mientras River piensa en llegar de la mejor manera al jueves 17 de septiembre, día en que retomará la actividad oficial visitando a San Pablo por el tercer partido de la fase de grupos de la Copa Libertadores, la dirigencia y el cuerpo técnico no pierden de vista otra cuestión importante para el futuro del plantel y del club: los jugadores que entraron ya transitan su último año de contrato y en un par de meses, en caso de así desearlo, podrían quedar con el pase en su poder.
Los nombres son Gonzalo Montiel, Lucas Martínez Quarta, Nicolás de la Cruz, Rafael Santos Borré, Javier Pinola, Jorge Moreira y Leonardo Ponzio. En este listado hay jugadores de distintas edades y situaciones, por lo que no todos los casos deben atenderse de la misma manera. En concreto, los cuatro que más preocupan al Millonario son los de Montiel y Martínez Quarta, el uruguayo De La Cruz y el colombiano Borré, futbolistas claves en la estructura de equipo del Muñeco y de muy buen valor de mercado, pensando en las finanzas del club.
Sabiendo que una renovación de contrato de esos cuatro casos implicaría una mejora de sueldo considerable, ante las distintas ofertas que podrían recibir a partir de enero para cambiar de equipo cuando en junio queden libres, no sería descabellado pensar en que River busque vender a los cuatro jugadores una vez que termine su participación en la presente Copa Libertadores. Además, en el caso de De La Cruz y Borré, hay un agregado: el Millo es socio de los pases con Liverpool (U) y del Atlético de Madrid, respectivamente.
Con Pinola y Ponzio la historia es distinta, porque dejarían la actividad profesional con el final de su contrato, y si Moreira se queda, podría renovar su vínculo teniendo en cuenta que tiene 30 años y podría pensar en un futuro en el club a mediano plazo, por ejemplo con la partida de Montiel en su puesto. Lo cierto es que son nombres que en este tiempo estarán constantemente en la cabeza de Gallardo, pero también de Enzo Francescoli y Rodolfo D'Onofrio, que deberán buscar la mejor resolución deportiva y económica con aquellos jugadores que transitan su etapa final de contrato.
